El Consejo de Ministros anunció ayer un incremento en la partida presupuestaria destinada a las becas-salario, que asciende a 82 millones de euros, para que puedan beneficiarse de ellas un 285% más de estudiantes universitarios. Para ello, se actualizará el umbral de renta familiar en un 2,6% con el fin de evitar la eventual expulsión de beneficiarios, como consecuencia de los incrementos salariales, y amplía esta modalidad de ayuda a los estudios de ciclos formativos de grado superior.
Asimismo, el consejo aprobó un Real Decreto que establece los umbrales de renta y patrimonio familiar y las cuantías de las becas de estudios postobligatorios para el próximo curso 2010-2011. Según explicó la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, medidas como éstas reflejan que el compromiso del Estado con la educación "se mantiene a pesar de la austeridad del momento".
Además, el Consejo de Ministros aprobó una modificación del Real Decreto que regula la nueva Prueba de Acceso a la Universidad, que reemplazará a la selectividad tradicional el próximo mes de junio, con dos fases: una obligatoria y otra voluntaria que permitirá que los estudiantes puedan mejorar sus calificaciones hasta en un máximo de cuatro materias.
Mientras, PP y Gobierno siguen enzarzados en un cruce de acusación tras no haber sellado el Pacto Educativo por la Educación, debido, según ellos a intereses políticos. Sin embargo, parece que la futura Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación correrá mejor suerte. El Gobierno aprobó ayer el proyecto de la ley, una norma que quiere impulsar la necesaria transformación del conocimiento en riqueza y ante la que existe voluntad de aprobarla con el mayor consenso posible, por parte del Ejecutivo y de la oposición.
De hecho, el portavoz del PP en la materia, Gabriel Elorriaga, dijo que el consenso "es posible y, sobre todo, deseable".
