El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, aseguró ayer que ya hay algunos indicadores tanto del segundo como del tercer trimestre que permiten pensar que el "punto álgido" del deterioro de la situación económica podría haber pasado ya.
Entre ellos -y junto a la mejora del PIB trimestral en cinco décimas respecto al de enero-marzo- destacó la recuperación de la confianza de los consumidores y el avance de la renta disponible de las familias, derivada del descenso de los tipos de interés y la evolución de la inflación. A su juicio, estos datos permiten esperar una mejora del consumo privado de cara al futuro, aunque es importante mantener la "prudencia" por las incertidumbres que aún persisten y seguir incidiendo en políticas económicas para recuperar la senda de crecimiento.
Además, valoró el hecho de que las exportaciones hayan vuelto a subir por primera vez en cinco trimestres.
