El empate del Betis en Córdoba, la victoria del Granada en Tarragona y la admisión, la semana pasada por el Comité de Apelación, de su recurso por alineación indebida ante el Barcelona B, abre un nuevo panorama sobre a fecha exacta en la que se puede concretar el ascenso bético, que ya no será el miércoles, aun ganándole al Tenerife, ni el jueves, aunque el Celta pinche en Salamanca.
Ese mismo jueves el Granada recibe al Huesca (20.00) y si le gana mantendrá los 13 puntos de desventaja con el Betis con sólo 12 por disputarse, pero quedaría la posibilidad, aunque sea remota, de que Apelación, o en última instancia, el CEDD, al que los nazarís piensan recurrir también, les dé la razón y os tres puntos que reclaman, con lo que su desventaja podría quedar en 10 puntos a falta de 12.
Por eso los béticos harían bien en no adelantar acontecimientos ese jueves –en el que presumiblemente fallará Apelación– aunque se le gane al Tenerife, pues para celebrar el ascenso esa noche debería pinchar el Celta en Salamanca y perder el Granada en casa ante el Huesca, lo que parece poco probable.
Para subir sin depender de nadie, el Betis necesita por tanto dos triunfos más: si gana a Tenerife y Nástic lo tendrá hecho. La celebración del ascenso tiene toda la pinta que será en Tarragona. O durante el regreso en el AVE, ya que más tarde juegan Granada y Celta.
