Desde julio de 2007, la tasa interanual de la inflación no había dado un respiro. En abril, el IPC se situó en el 4,2% a nivel nacional, tres décimas por debajo que el dato registrado en marzo. En Andalucía, aunque también cayó, lo hizo con menos intensidad, tornando así del 4,5% al 4,3% del mes pasado.
Algo más aliviados andan los bolsillos de los españoles tras conocerse el Índice de Precios al Consumo (IPC) de abril, dato que publicó ayer el Instituto Nacional del Estadística (INE). Tras continuadas subidas, la tasa interanual se situó en el 4,2%, tres décimas por debajo del mes anterior. Algo menos (una décima) disminuyó la inflación en Andalucía, que se situó en el 4,3% el mes pasado frente al 4,5% que ostentaba en marzo, cuando se colocó en la misma situación que la media española, la inflación más alta desde julio de 1995.
En la misma línea que la región andaluza se encuentran otras comunidades como Aragón o Asturias, mientras que el dato del IPC más alto se registró en Cantabria, con el 4,7%. En el otro lado de la balanza, Madrid, Ceuta y Melilla, con un 3,9%.
Por su parte, la tasa anual de la inflación subyacente (que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados), se situó en el 3,1%, tres décimas por debajo de la registrada en marzo.
En cuanto a la tasa intermensual del IPC, en Andalucía creció un 1,2%, de nuevo una décima por encima de la inflación media española. La culpa de esta subida la tiene principalmente el alza de los precios de vestido y calzado, una tónica que se repite en España. Así, a nivel nacional, este apartado se incrementó un 9,3% (un 9,8% en el caso andaluz), un comportamiento habitual por la entrada de la nueva temporada primavera-verano. En segundo lugar, la vivienda se encareció un 0,9% (un 1,3% en la región) en el último mes, un aumento que se debe, según el INE, a la subida del precio del gas, mientras que el transporte subió un 0,9% (un 0,6% en Andalucía) por el alza del coste de los carburantes y los lubricantes.
Por el contrario, bajaron los precios en ocio y cultura (-1,1% en España y -0,8% en Andalucía), en buena parte debido al descenso en viajes organizados (-5,7% en la región) tras el fin de la Semana Santa.
En la tasa interanual, los grupos que influyeron en la disminución de tres décimas del IPC fueron el transporte (con una subida del 6,7%, casi un punto menos que el mes anterior). Esta bajada se explica porque la subida de carburantes y lubricantes es menos acentuada este año que en abril de 2007. Por otro lado, ayudaron el ocio y la cultura (que cayó un 1,5%, por el cambio de fecha de la Semana Santa) y los hoteles, cafés y restaurantes (que dismuye su tasa anual tres décimas). También lo hizo el apartado de alimentos y bebidas no alcohólicas, cuya variación anual disminuyó tres décimas hasta el 6,6%, por la evolución del precio de la carne de ave y el de las legumbres, hortalizas frescas y leche, que bajan en abril de 2008 frente a la subida que experimentaron en el mismo mes de 2007.
En cuanto a los productos que más se encarecieron en un año, se encuentran la leche (25,9%), los huevos (12,3%) y las frutas frescas (11,8%). Entre los que más bajan, destacan las patatas y sus preparados (-11,1%), los objetos recreativos (-6,3%) y medicamentos (-1,1%).
Ante estos datos, la Consejería de Economía y Hacienda destacó la moderación del ritmo de crecimiento del IPC porque el dato supone "la primera desaceleración desde que en julio de 2007 iniciara su trayectoria alcista". Según la Junta, esta contención "viene determinada, de un lado, por la moderación del ritmo de crecimiento de los grupos más inflacionistas, como alimentos, bebidas y tabaco y transporte, que crecen 0,5 y 0,8 puntos menos que en el mes anterior, respectivamente". De otro, "por el efecto calendario derivado de la celebración de la Semana Santa en marzo".
Por su parte, la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) valoró ayer "negativamente" los niveles de inflación y abogó por medidas económicas y fiscales que favorezcan el estímulo de la actividad productiva.
