La tranquilidad de los vecinos ha durado dos días. El titular del Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 10 de Sevilla levantó ayer la paralización cautelar de las obras del parking municipal de Ronda de Triana, ordenada el pasado miércoles ante el temor de que se produjeran nuevos "desplazamientos" de los bloques de Manuel Arellano.
La sorpresa de los afectados fue ayer mayúscula. La portavoz de los vecinos, Concepción Sánchez, comentó tras la vista -de casi tres horas- ante el juez que no se lo esperaban y que, por tanto, siguen "preocupados y con las mismas inquietudes". "Hasta que no ocurre una desgracia parece que nadie hace nada", lamentó. Por ahora, los vecinos están a la espera de que el juez le remita la semana que viene el auto, para así conocer su argumentación y decidir si lo recurren o no.
El abogado de los vecinos, Enrique Yrazusta, confirmó que el juez dio la autorización para que el Ayuntamiento pueda seguir los trabajos en el aparcamiento subterráneo de Crucero Baleares y que, "curiosamente", aparecieron los "papeles" que los vecinos habían reclamado por activa y por pasiva al Consistorio. "Han presentado toda la documentación negada sistemáticamente a los vecinos", denunció Concepción Sánchez.
Y es que los responsables municipales se presentaron en el juzgado con una batería de informes para avalar que se han adoptado todas las medidas de seguridad oportunas. Eso sí, el informe de Vorsevi (que según los vecinos ni siquiera se ha encargado) aún no está listo ni lo estará en los próximos días. En él se analizará la conveniencia o no de reforzar los cimientos de los bloques afectados por las obras antes o después de que éstas terminen. "Al Ayuntamiento no les importa la gente, sino que no le paren la obra", criticó Yrazusta tras subrayar la falta de colaboración del Gobierno local.
A pesar de los informes municipales, los vecinos insisten en que sus casas están en peligro. Incluso cuentan con el asesoramiento de Antonio Jaramillo, catedrático de Ingeniería del Terreno de la Universidad de Sevilla, quien ha alertado del riesgo que conllevan las filtraciones que se han detectado en los últimos días. De hecho, el Consistorio ha realizado obras de emergencia para sellarlas.
El pasado miércoles, el mismo juzgado ordenó la paralización "inmediata" de las obras del aparcamiento subterráneo de Crucero Baleares como medida cautelar, hasta que "se ejecuten las correspondientes medidas de seguridad determinadas por la empresa contratada por la Delegación de Movilidad", rezaba en el auto.
