El papa Benedicto XVI hizo un llamamiento para el "fin inmediato de los actos de violencia y el conflicto fratricida en Kenia" y animó a sus líderes políticos a que resuelvan "las actuales dificultades" mediante el diálogo.
Benedicto XVI así lo indica en una carta dirigida al presidente de la Conferencia Episcopal de Kenia, John Njue, enviada en su nombre por el secretario de Estado vaticano, Tarcisio Bertone.
El Pontífice muestra su esperanza en que se evite, lo más rápidamente posible, "la amenaza de conflicto étnico" y señala que la violencia es "fútil como medio para resolver los problemas, sólo los agrava y lleva a sufrimientos sin precedentes".
El Papa, quien sigue con "profundo pesar y preocupación" los actos de violencia en ese país, asegura que orará para que "esta gran tragedia llegue pronto a su fin". Además, expresa su cercanía con las víctimas de los disturbios étnicos, desatados en protesta por los resultados electorales del pasado 27 de diciembre.
Al respecto, se refiere a las "muchas personas que han perdido la vida, con frecuencia de manera atroz", los heridos y los que han tenido que abandonar sus hogares.
