El desplome del petróleo ha alcanzado un punto de inflexión. El Brent, crudo de referencia en Europa, rozaba ayer, a cierre de semana, los 70 dólares, dos más que el lunes, un valor que no se recordaba desde noviembre pasado. La posible causa, el mejor comportamiento del empleo en EEUU. Gasolinas al alza.
Fue uno de los elementos que hizo que el pasado año la inflación se disparara, no sólo en España. El crudo Brent, cuyo precio por barril llegó a valer más de 142 dólares el pasado julio para luego caer de manera precipitada -en enero no llegaba a costar 35 dólares-, comienza a remontar. El petróleo de referencia en Europa ha subido dos dólares en una semana, hasta rozar la barrera de los 70 dólares, y esto se ha visto rápidamente reflejado en el coste de los carburantes.
En concreto, ayer marcaba los 69,91 dólares en el Mercado de Futuros de Londres frente a los 67,97 que se anotaba a principios de semana.
La subida de los precios ha estado impulsada por los positivos datos de empleo llegados desde EEUU, que sugieren que lo peor de la crisis económica ya ha pasado para el primer consumidor energético del mundo.
Además, en los últimos días, el Brent ha reaccionado positivamente a la decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de mantener inalterada su cuota de producción conjunta de crudo, debido a las primeras señales de recuperación y al reciente fortalecimiento de los precios en los mercados.
La OPEP, que la semana pasada reiteró su intención de mantener los recortes de producción aprobados, considera imprescindible que el precio del barril oscile entre los 75 y los 80 dólares -precio que asegura debe alcanzar a final de año- para que sus miembros puedan soportar la inversión que han de realizar si se quiere evitar la escasez en la oferta de crudo.
La mejor situación económica en EEUU, sobre todo desde el punto de vista laboral, fue también la causa de que el precio del barril de petróleo Texas, de referencia en Estados Unidos, superara ayer la barrera de los 70 dólares, un nivel que no había marcado desde el pasado octubre.
En concreto, el barril de petróleo West Texas llegó a cotizar en el New York Mercantile Exchange a un precio de 70,32 dólares por barril después de que el Departamento de Empleo de EEUU informara de que la primera economía mundial sólo había destruido 345.000 empleos en el mes de mayo, muy por debajo de las expectativas del mercado y de la media de despidos de los últimos meses, aunque la tasa de paro en EEUU se elevó al 9,4%, su máximo en un cuarto de siglo.
progresión. El petróleo ha sido uno de los productos más variables en los últimos meses. Tras alcanzar cotas históricas el pasado verano y caer de forma notable a principios de año, las subidas en los meses siguientes ha sido continua pero mínima. De hecho, entre los pasados meses de febrero y mayo sólo vio incrementado su precio en poco más de cuatro dólares, sólo dos menos de la subida experimentada en la última semana.
