El PP ha rebajado de siete a cinco las tenencias de alcaldía en Écija y establecido seis áreas de gobierno "para simplificar la estructura administrativa y para recortar el gasto", según el alcalde de Écija, Ricardo Gil-Toresano, que ya firmó el decreto de composición del ejecutivo local.
Los tenientes de alcalde son Silvia Heredia, que se hará cargo de Presidencia, Seguridad Ciudadana y Personal; Rafael Serrano, de Hacienda, Urbanismo, Obras Públicas y Vivienda; Carlos Onetti, para quien se crea la tenencia de alcaldía de Agricultura y Medio Ambiente; Rosario Díaz, que toma posesión de Bienestar Social, Igualdad y Familia; y José Herrera, responsable de Desarrollo y Empleo.
Silvia Heredia y Rafael Serrano serán portavoz y viceportavoz del nuevo gobierno. Rafael Benítez, como concejal delegado de Turismo y Cultura; Vanesa Onetti, como titular de Juventud y Deportes y Miguel Ángel Fernández Castellanos, que se hace cargo de Planificación Presupuestaria, completan el gobierno local. De los nueve ediles del ejecutivo popular, ocho estarán liberados -esto es, cobrarán de las arcas públicas-, seis de ellos con dedicación exclusiva. El titular de Urbanismo y Hacienda, Rafael Serrano, se libera al 80%, mientras que Carlos Onetti, concejal de Agricultura, estará dedicado a la política municipal a media jornada, con una liberación al 50%, según el PP, que no ha calculado el dinero que esta nueva estructura ahorrará al erario público.
No se libera Miguel Ángel Fernández Castellanos. El secretario general del PP ecijano vuelve a la sala capitular, donde ya fue concejal en el mandato 2003-2007. Para él se reserva Planificación Presupuestaria, un departamento integrado en Hacienda, Urbanismo, Obras Públicas y Vivienda y que, básicamente, le hace encargado de confeccionar el presupuesto del Ayuntamiento.
Con la reducción de tenencias de alcaldía, el PP también promete una reducción del personal de confianza adscrito a cada concejalía, si bien es cierto que, en los últimos años, y obligado por la crisis económica, el gobierno del PSOE ya redujo el número de empleados de libre designación de once a nueve y de nueve a seis, al igual que recortó las asignaciones a los grupos políticos.
Para Ricardo Gil-Toresano "de lo que se trata es de ahorrar lo máximo posible dada la pésima situación económica en la que se encuentra nuestro Ayuntamiento". El regidor aseguró que ya se está elaborando una auditoría interna -"porque no podemos hacer gastos excesivos y para eso tenemos trabajadores muy capacitados", dijo- para evaluar el estado de las cuentas públicas.
El nuevo alcalde, que mantuvo una reunión ayer con el resto de grupos municipales, anunció que no se van a cubrir las plazas de gerente de las empresas públicas (tres, dos fundaciones y dos organismos autónomos).
