La parroquia de San José contará en breve plazo de tiempo con un nuevo retablo y revestimiento de las paredes, con el fin de eliminar el problema de acústica que padece la iglesia. Además, la imagen del titular del templo será restaurada. El párroco, Joaquín Reina Sousa, ha dado a conocer el proyecto, junto a Sebastián Martínez Zaya y Consolación Troya Pérez, responsables de la empresa encargada de acometer dichas tareas.
Según explicaron Martínez y Troya, el nuevo proyecto se basa en cuatro pilares fundamentales. El primero de ellos en la "reutilización de los ornamentos existentes en la parroquia, como las pinturas que presiden la nave central, los frontones del altar mayor, el pequeño retablo del sagrario, y el crucificado". El segundo se fundamenra en la "relación del nuevo retablo con la historia del templo, gracias a la reutilización de dichos elementos". El tercero busca la "familiaridad con la feligresía, al no resultar nada extraño ni nuevo y, por último, la búsqueda del sentido iconográfico y estético que pretendemos darle".
La nueva obra está inspirada en el actual pequeño retablo existente en el sagrario, que pasará a convertirse en hornacina del altar mayor, donde se ubicará la imagen de San José. El resto se construirá imitando a dicha hornacina. Así, el titular de la parroquia ocupará la zona central, junto al cual se encontrarán los cuadros de los desposorios de la Virgen y San José, la anunciación de la Virgen, la huída a Egipto y la Sagrada Familia en Nazaret, que ahora están en la nave del templo. Presidiendo la parte superior del retablo estará una gran pintura representando al monte Calvario, que enmarcará al crucificado. Con este nuevo proyecto se solventará, además, las incoherencias existentes en la lectura del actual retablo.
Mientras tanto, el sagrario presidirá el altar situado en el lateral izquierdo del templo. En dicho enclave se ubicarán las pinturas de los evangelistas que se encuentran actualmente en el retablo mayor, que rodearán al Santísimo Sacramento.
Acústica . Por otro lado, la solución estético-acústica para eliminar las dificultades sonoras que presenta la parroquia pasa por cubrir las paredes con cortinajes. En este caso, se colocará terciopelo en los pilares del templo con lo que, en palabras de los directores del proyecto se dará una doble solución: "engalanar la iglesia para darle una imagen más cálida, elegante y señorial, así como solucionar el problema existente con el eco", afirmaron.
Todo ello, con un plazo de ejecución de cinco meses, tiene un presupuesto superior a los 14.000 euros, de los que 3.000 euros son un donativo que la propia empresa hará a la parroquia. Finalmente, también se acometerá la restauración de la imagen de San José, una talla del siglo XVIII que preside el templo. Estos trabajos tienen un coste que ronda los 6.000 euros, y un plazo de ejecución de cuatro meses. La encargada de acometer el proyecto será la empresa Gestión, conservación y restauración de arte Utrera, Gecra S.L.
