Local

El retraso de la jubilación será de un mes cada año a partir de 2013

Se adelanta a 2022 la entrada en vigor de los 25 años para realizar el cálculo de la prestación.

el 28 ene 2011 / 22:16 h.

TAGS:

Valeriano Gómez bebe agua durante su comparecencia tras el Consejo de Ministros para explicar el anteproyecto de Ley.

Tras una larga negociación de los flecos para la reforma de las pensiones, que se prolongó ayer hasta altas horas de la madrugada, por fin el Gobierno concretó algunos de sus detalles más importantes, entre ellos cómo se distribuirá el periodo transitorio hasta llegar a la nueva edad legal de jubilación a los 67 años -frente a los 65 actuales- y a partir de cuándo comenzarán a regir los 25 años para calcular la cuantía de las prestaciones, en lugar de los 15 aún en vigor.

Los cambios arrancarán dentro de dos años, de forma que no afectarán a los que se vayan a retirar del mercado laboral ni este año ni el que viene. Por tanto, en 2011 y 2012 podrán jubilarse con 65 años, siendo los últimos 15 los que computarán al cifrar cuánto cobrarán de pensión.

Los empleados que, por edad, abandonen el mercado de trabajo en 2013 lo harán a los 65 años más un mes. Se irá agregando un mes más hasta que en 2021 se alcancen 66 años. Después se acelera el ritmo, de manera que para 2022 serán 66 años y dos meses, y así sucesivamente hasta que en 2027 rijan los 67 años como edad de jubilación.

Mientras, pasar de 15 años de cotización a 25 para el cálculo de la pensión será más rápido, algo que beneficia a las cuentas del Estado, pues así ahorra en el gasto por prestaciones. Si en la cuenta entran más años, la cuantía de la prestación baja porque, al menos en teoría, se gana más en los últimos años de trabajo que en los primeros.

En concreto, en 2013 serán ya 16 años, y se incrementará en uno hasta 2022, cuando serán 25 años de referencia, que se mantendrán hasta 2027.

¿Qué pasa con quienes se quieran jubilar a los 65 años y cobrar la paga completa porque estiman que tienen tiempo de cotización holgado? Ya es conocido que quienes acumulen 38,5 años cotizados podrán retirarse del mercado de trabajo a los 65. Supone 3,5 años más que los requeridos en la actualidad para percibir el 100% de la prestación, y este periodo adicional también vendrá marcado por la progresividad.

En concreto, el tránsito desde los 35 años hasta los 38,5 se hará aumentando 6 meses cada 2 años a partir de 2013. Es decir, en 2015 serán 35,6 años, en 2017, 36 años, en 2019, 35,5 años, ya en 2021, 37 años, en 2023, 37,5 años, en 2025, 38 años y llegamos al último ejercicio, el de 2027, con 38,5 años, el tope marcado. Esto conlleva suavizar la reforma.

Pero habrá también incentivos para alargar la edad de jubilación. Cada año que se retrase esa retirada, tanto a los 65 como a los 67, se mejorará la pensión un 3,5%, hasta que alcanzar el máximo de pensión régimen general de la Seguridad Social, situada en 34.526 euros anuales (repartidos en catorce pagas).

Otra novedad, la jubilación anticipada a los 63 años -ahora está en 61- sólo será posible si se acreditan 33 años cotizados. Hay penalización. Así, el descuento de la cuantía de la pensión será de un 7,5% por cada año.

Reacciones. El Pacto de Estado se vislumbra cerca. Así, el presidente del PP, Mariano Rajoy, mostró ayer su disposición a dialogar y a llegar a entendimientos sobre la reforma de las pensiones y pidió al Gobierno que esta decisión se tome "con el acuerdo de todas las fuerzas políticas", algo que, a su juicio, sería positivo porque estas medidas "deben quedar fuera del debate político".

El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran, por su lado, aplaudió las líneas maestras del acuerdo y remarcó que su posición favorable es sin esperar "nada a cambio" del Gobierno, como la de permitir a Cataluña la emisión de deuda.

Menos contentos se mostraron los partidos de izquierda. Así, el coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Cayo Lara, auguró que el Gobierno no va a dejar "ni un derecho en pie" después del acuerdo alcanzado, un pacto que, sospecha, conlleva peores condiciones para los trabajadores que el que el Ejecutivo. Por su parte, el BNG lamentó que los sindicatos acepten una "barbaridad" que recortará un 10% las pensiones expusiera en Bruselas.

CCOO y UGT pidieron tanto al PP como a los partidos de izquierda que respalden el acuerdo, tras "neutralizar, reconducir y reorientar" las medidas que pretendía imponer el Ejecutivo.

  • 1