La Policía Local lleva más de cuatro años con un plan de reestructuración que implicaba un incremento de más de 200 agentes paralizado por el bloqueo de las negociaciones. Este documento trataba de poner fin a un problema latente que ha estallado en plena crisis económica: el mantenimiento de los servicios a base de pagar horas extras y comprar descansos. El Ayuntamiento quiere echar en parte el freno este año cuando pese a todo se pagarán más de 11 millones de euros en concepto de productividad. El conflicto en la Policía Local estalló en julio.
“El problema es la falta de policías. Nadie va a hacer horas extra gratis y no nos fiamos de la palabra del Ayuntamiento y de su compromiso de pagarlas en mayo de 2011. Si esto sigue así se notará, y mucho, a partir de septiembre y en las fiestas de primavera”, advierte el secretario general del Sppme, Manuel Bustelo. Para que la situación siga así, no obstante, todos los agentes deben mantener la postura que defiende el Sppme desde julio –no hacer horas extra– pese a la merma salarial que supone: 192 euros al día. “Sólo seis o siete que deben algún favor siguen trabajando”, apunta Bustelo. Desde UGT censuran precisamente que estos policías sean criticados: “Se les está machacando cuando están actuando de forma voluntaria y son libres de confiar o no en que sus horas extra serán abonadas”. Este sindicato sí insta a tomar medidas de forma inmediata para resolver los problemas del cuerpo de Policía, que pasan en primer lugar por una sabida salarial y por un reajuste de las categorías para que se resuelva una deficiencia que provoca que los agentes cobren unos 200 euros mensuales menos de lo que les corresponde. En segundo lugar, UGT insta a cumplir los compromisos y a aumentar la plantilla. “Es un problema muy grave que va a empeorar, el Ayuntamiento debe aumentar la plantilla aunque sea endeudándose, que tiene margen hasta finales de este año”. Ni UGT ni Sppme abogan por cambiar el calendario laboral.
