Juan Espadas y Susana López, ayer, reunidos con trabajadores de la ayuda a domicilio. / El Correo
El PSOE no quiere que la ayuda a domicilio se acabe en Sevilla a partir del 1 de enero, por eso reclamó ayer que el Gobierno de Juan Ignacio Zoido (PP) renuncie a «su intención» de retirar los 6,8 millones de euros de aportación municipal. «Ese recorte puede poner en riesgo el futuro de este servicio y de más de 1.500 trabajadores», denunció ayer el portavoz municipal socialista, Juan Espadas.
El socialista y la concejal Susana López se reunieron ayer con representantes de los trabajadores de la empresa que gestiona el servicio de ayuda a domicilio para analizar la «preocupación y la tensión» existente y, tras esta reunión, Espadas exigió al alcalde que realice «de forma inmediata todos los trámites para que el Ayuntamiento siga prestando el servicio a domicilio con el mismo presupuesto y en las mismas condiciones actuales».
La respuesta fue rápida. La delegada de Familia, Asuntos Sociales y Zonas de Especial Actuación, Dolores de Pablo-Blanco, replicó que «o Espadas no se entera o no quiere enterarse que desde el Ayuntamiento venimos trabajando desde hace meses para la renovación del servicio de ayuda a domicilio, teniendo en cuenta que el día 5 de febrero se envió una carta solicitando una reunión con la consejera de la Junta para tratar el tema, algo de lo que aún no hemos obtenido respuesta alguna», añadió en una nota.
El servicio de ayuda a domicilio que se presta en Sevilla se rige por un convenio entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento renovado por última vez en noviembre de 2011 por el que la Junta subvenciona la mayor parte del programa pagando 13 euros por hora de servicio, mientras que el Ayuntamiento abona un complemento para mejorar salarios y condiciones de trabajo que asciende a 6,8 millones de euros, según Europa Press.
Para Espadas, la ley de reforma local ha situado este programa como competencia «impropia», retirando las posibilidades de ejercerlo a los ayuntamientos, pero en el caso de Andalucía, «la Junta ha aprobado un decreto que abre la puerta a conservar este servicio». Sin embargo, se debe realizar una importante tramitación que el Gobierno local «aún no ha comenzado pese a que los plazos empiezan a estar ajustados». El límite para fijar un nuevo marco de colaboración, el nuevo coste del servicio, sacar un nuevo concurso público y realizar la adjudicación acaba el 31 de diciembre.
«Si el gobierno de Zoido, como hace siempre, deja todo para última hora, se limita a buscar la confrontación o establecer como su único objetivo recortar los 6,8 millones de aportación municipal, las políticas y de las decisiones de la derecha pueden dejar a esta ciudad sin ayuda a domicilio a partir del 1 de enero de 2015», lamentó el socialista.
En contra, la delegada de Familia, Asuntos Sociales y Zonas de Especial Actuación pidió a Espadas que «no alarme con mentiras» sobre la ayuda a domicilio y que le pida a la Junta que abone «los siete millones de euros que adeuda».
«La realidad del Servicio de Ayuda a Domicilio es que el Ayuntamiento, como bien conocen los ciudadanos y el PSOE, se viene haciendo cargo de él garantizando su prestación al contratarlo y abonando puntualmente todas las facturas, para que los trabajadores reciban sus nóminas mes a mes y sin retrasos», insistió De Pablo-Blanco
La delegada concluye la nota afirmando que el Ayuntamiento no ha desmantelado los servicios sociales «ni piensa hacerlo» y que prueba de ello es «el incremento de personal, sin precedente, que se ha hecho en el presente año con nueve auxiliares, funcionarios de plantilla, para la dependencia o el incremento del presupuesto entre otras acciones», defendió.
