Local

Espadas toma el relevo en el PSOE

El candidato impulsa su campaña y el partido le busca un hueco ante un alcalde que se reivindica. El grupo se prepara para otra fractura por las listas y el PSOE aboga por buscar perfiles.

el 29 ago 2010 / 18:37 h.

TAGS:

Juan Espadas.

El PSOE forzó el adelanto de su candidatura en Sevilla para zanjar debates internos y acelerar la presentación de su elegido, Juan Espadas. Sin embargo, el ritmo ha sido lento y el trabajo más interno que público. Hasta ahora. Aunque su designación formal por parte del federal se ha retrasado hasta la última semana de septiembre, la reunión de la Ejecutiva esta semana marcará el pistoletazo de salida de la campaña. Arranca así un curso político clave para el PSOE, con una mirada puesta en los comicios de mayo y la otra en la Plaza Nueva, donde Alfredo Sánchez Monteseirín encarará (si se cumplen los acuerdos) sus últimos meses en la Alcaldía.

El entorno de Espadas y la dirección provincial están tan convencidos de que aún hay margen como de que no hay tiempo que perder. Agosto se ha dejado pasar en blanco. Pero las encuestas siguen siendo desfavorables, el rostro de Espadas demasiado desconocido, la marca PSOE se continúa debilitando y la imagen del Consistorio no acaba de reducir su deterioro.

El escenario no es cómodo y son muchas las dificultades que se deberán salvar. La primera, en el propio Ayuntamiento. El curso que arranca no sólo es el cierre de la etapa de Monteseirín, es la prueba de fuego para decenas de proyectos. Es el momento de comprobar si como apuntan desde Plaza Nueva se producirá un efecto similar al de la Avenida de la Constitución, cuyo impacto fue muy superior al malestar acumulado por las obras y su coste, o si, como temen otros, el desgaste de algunos proyectos es ya irrecuperable. La prueba la deberán pasar las setas de la Encarnación, la ampliación de Fibes, las restricciones de tráfico en el Centro o los pasos inferiores.

Si desde el partido se abogaba por un año tranquilo para que se asienten los proyectos, los retrasos lo impedirán por completo. En septiembre arranca un nuevo zafarrancho de obras, con los planes extraordinarios del 2009 y de 2010 solapados, e incluso ya hay obras, como el paso inferior del Tamarguillo o los aparcamientos para residentes, que quedarán para otro mandato. Serán también meses decisivos para un caso como Mercasevilla, cuya repercusión en el electorado está aún por determinar. Las tres causas siguen abiertas, la lista de imputados puede crecer y el PSOE es consciente de que el PP aún puede tener cartas guardadas.

Y en medio de todo, un alcalde que no sólo se resiste a perder protagonismo sino que se ha reactivado en los últimos meses en un proceso de reivindicación de su labor y de una figura criticada dentro y fuera de su partido. "Está como una moto", señalan desde su entorno. Una actitud que el sector afín a Viera y la Ejecutiva observa con preocupación ante el riesgo de que Espadas no encuentre su hueco en este escenario.

Y quedará además otra prueba interna: las listas. En el grupo municipal empiezan a asomar los temores a una nueva fractura interna por los pulsos para entrar en la candidatura. Mientras el entorno de Espadas quiere aparcar ese debate, en el sector vierista se aboga por una lista renovada y en la que el propio candidato tenga su espacio.

En el partido se promueve esta vez buscar perfiles adecuados a las responsabilidades más que una representación de sectores socialistas, pero el PSOE se mueve en un precario equilibrio de agrupaciones que ya en 2007 no se logró reflejar en las listas.

Espadas juega con otro hándicap. Si para 2007 el candidato restaba votos, en este caso es la imagen del partido la que está en caída libre. "El que le conoce habla bien de él", apunta un dirigente socialista. El problema es el punto de partida. Tiene nueve meses para darse a conocer y trazar su propia línea.

  • 1