Vídeo de José Luis Iglesias (@joseluisigro en Twitter):
El incendio de un transformador eléctrico de Endesa situado en una esquina de Los Arcos provocó anoche un espectacular fuego, con llamas de más de diez metros de altura, que dejaron sin luz a 6.000 clientes de varios barrios y obligaron a cortar el tráfico en las inmediaciones del centro comercial. Los semáforos de las manzanas más cercanas se apagaron, varias líneas de autobuses como la 02, la 27 y la 29 fueron desviadas y en los restaurantes y cines de Los Arcos fueron desalojados cientos de clientes, a los que pidieron incluso que sacasen sus coches del aparcamiento. Por suerte, el suceso fue más aparatoso que grave y poco más de una hora después el fuego estaba controlado, el tráfico restablecido y no había que lamentar ningún herido, tan sólo daños materiales.
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Varias explosiones y las enormes llamas llamaron la atención de los vecinos sobre las 22.45 horas. En el McDonalds de Los Arcos, ocho trabajadores eran avisados por el guardia de seguridad de que debían desalojar. Podíamos tener 60 clientes, pero siguieron comiendo tan tranquilos, no te creas, decía una de las empleadas media hora después, sentada frente al centro comercial, aguardando a que le indicaran qué debían hacer, pero ya segura de que no volvería a su trabajo. Algo similar pasó en otros bares como Gambrinus o los Cien Montaditos, y de los cines. Pero la gente salía muy tranquila, insistían los trabajadores
La Policía Nacional y la Local, con más de una docena de patrulleros, se habían coordinado para cortar todo el entorno del centro comercial, que hoy abrirá con normalidad. Sólo podían pasar coches por debajo del paso subterráneo del Tamarguillo. Los demás se iban desviando como podían. Una amalgama de luces azules y amarillas, incluidas las de varias ambulancias del 061 que no tuvieron que atender a nadie, hipnotizaban a decenas de curiosos que, incluso con las llamas ya apagadas y apenas humo saliendo del transformador, seguían recordando cómo de enormes eran las llamas. Endesa comenzó a trabajar de inmediato en la recuperación de la electricidad, que anoche mismo volvió a muchas de las calles afectadas por el fuego, que comenzó en uno de los seis transformadores de Endesa situados en Los Arcos. Pasado el peligro, un par de coches de Bomberos permanecían de guardia, más allá de la medianoche, para asegurarse de que las llamas no se reavivaban.
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