Una mujer de origen lituano falleció esta mañana tras llevar casi tres meses en estado de coma después de que el pasado 18 de julio fuera agredida sexualmente en la zona del cementerio de Valencia presuntamente por su pareja y otra persona.
Así lo indicó hoy en declaraciones a los medios de comunicación el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, después de guardar un minuto de silencio tras el último caso de violencia contra la mujer ocurrido en la provincia de Alicante.
La mujer, de unos 40 años, fue agredida sexualmente el pasado mes de julio en un descampado próximo al cementerio de Valencia por supuestamente su pareja y un amigo de éste.
Como consecuencia de la agresión, la víctima tuvo que ser trasladada a un hospital de la ciudad, a la Unidad de Cuidados Intensivo (UCI), donde quedó ingresada en estado de coma hasta esta mañana, cuando falleció sobre las 7.00 horas.
Por su parte, los agentes lograron detener a su compañero sentimental y a un amigo de éste por su supuesta relación con los hechos, les tomó declaración y pasaron a disposición judicial. El juez decretó para ellos prisión provisional.
Al respecto, Peralta afirmó que esta nueva víctima "debe de incluirse en las estadísticas de violencia de género", ya que "fue agredida por su pareja". Este hecho, agregó, "viene a ratificar la necesidad de no bajar la guardia y de mantenerse atento para luchar contra esta forma de violencia".
Mostró, en este sentido, su rechazo "radical" a la violencia machista, también en relación con lo ocurrido en San Fulgencio (Alicante), donde un hombre supuestamente mató a su mujer y luego se suicidó.
En este caso, se trata, dijo, de unos hechos "en el que se ven involucradas personas extranjeras", por lo que "no responden a la cultura de un país, sino a una cultura machista de carácter internacional, que tiene muchos siglos".
Ante este tipo de acontecimientos, volvió a mostrar su compromiso de poner "todos los medios adecuados" para frenarlos. Uno de ellos, agregó, es la consecución de información entre todos los países europeos en materia de violencia de género "de cara a conseguir que cualquier país pueda tener acceso a los antecedentes y pueda existir una orden de protección y medidas adecuadas con vigencia europea".
