Dos trabajadores inmigrantes fallecieron ayer y otros tres -dos españoles y uno marroquí- resultaron heridos en un accidente de tráfico que se produjo en la autovía A-381, que une las localidades gaditanas de Jerez de la Frontera y Los Barrios.
El accidente tuvo lugar en el término municipal de Jerez de la Frontera cuando los trabajadores se dirigían a Badajoz, procedentes de Algeciras. Los fallecidos son de nacionalidad filipina, E.D.R., de 29 años y ecuatoriana, A.F.G.M., de 31 años, según fuentes de la Guardia Civil.
El siniestro se produjo alrededor de las ocho de la mañana de ayer en las inmediaciones de una cementera, cuando por causas aún desconocidas el conductor perdió el control de la furgoneta que conducía, una Ford Transit, impactando con los quitamiedos y produciéndose el vuelco.
De los otros tres ocupantes, dos trabajadores resultaron heridos graves, un marroquí de 45 años con "traumatismos múltiples" y un español de 20 años aquejado de diversos "traumatismos", mientras el tercero, un español de 35 años, sólo tiene heridas leves y su estado "no reviste gravedad", según informaron a Europa Press fuentes del servicio médico. Los heridos fueron trasladados de urgencia al Hospital de Jerez, donde fueron intervenidos. Fuentes cercanas a la investigación consideran que el siniestro se trata de un "accidente laboral" in itinere puesto que los ocupantes se dirigían a Badajoz por cuestiones laborales.
Los accidentes laborales in itinere son los que se producen tanto en la ida como en la vuelta de los empleados a su puesto de trabajo. El Ministerio de Trabajo no contabiliza muchos de estos siniestros como accidente laboral, dada la dificultad que conlleva demostrar que el trayecto que recorría el empleado estaba relacionada con su trabajo. En el contexto judicial existe también este debate, entre magistrados que consideran un accidente in itinere como aquel que se produce con ocasión o por consecuencia del trabajo, y jueces que niegan esa posibilidad. Según un informe de UGT publicado el pasado lunes, de las 400 víctimas que perdieron la vida por accidentes laborales a nivel nacional en los seis primeros meses de 2009, 104 fallecieron en el trayecto de su casa al trabajo o viceversa.
Por otra parte, la Federación del Metal, Construcción y Afines (MCA) de UGT en Huelva reclamó ayer a la Inspección de Trabajo que averigüe si el joven de 26 años fallecido el pasado lunes mientras trabajaba pintando el polideportivo del municipio onubense de Higuera de la Sierra había pasado un reconocimiento médico previo al trabajo.
Así lo indicó el secretario general de la MCA de Huelva, Sebastián Donaire, durante la concentración silenciosa por la muerte del joven en la que participó, junto a otros compañeros del sindicato, a las puertas de la sede de UGT. Donaire pidió tener "cautela" en relación a este caso y esperar el resultado de las investigaciones de la Fiscalía, la Inspección de Trabajo y la Policía judicial que determinarán en qué circunstancias se produjo la muerte. "Hay que saber las condiciones a las que estaba expuesto y, sobre todo, averiguar si se le había realizado un reconocimiento médico o no", recalcó el dirigente.
Todo apunta a que la causa de la muerte pudo ser un infarto, según reconoció Donaire. Sin embargo, el líder de UGT en Huelva emplazó a conocer los resultados de la autopsia, pues "será el informe de los forenses el que determine con exactitud la causa de la muerte", cerró.
