El documento fue presentado a la junta de gobierno en la noche del miércoles. El escrito que acompaña a los pliegos de rúbricas reclama la convocatoria de un cabildo general para "la renovación y actualización de las Reglas de la hermandad, adaptándola a las Normas Diocesanas de 1997, el Código de Derecho Canónico de 1983 y demás normas concordantes del Derecho Universal de la Iglesia", reza en el citado documento, que según explica una de las hermanas fue "sellado y entregado en la casa de hermandad".
La reforma de las Reglas llevaría consigo la plena equiparación de igualdad de derechos de hombres y mujeres, uno de los anhelos de este grupo de hermanos entre los que se encuentran bastantes hermanas, algunas reivindicaron su sitio en la cofradía hace unas semanas con el gesto de levantarse en la función principal para jurar las Reglas, un acto, que al igual que la estación penitencial, sigue reservado a parte masculina de la nómina.
El hermano mayor, Antonio Pineda Capmany, no ha encajado muy bien este movimiento de las hermanas a escasos días de la Semana Santa. Reconoce que el número de firmas "sí es suficiente" para el cabildo, aunque rehúsa precisar la fecha. Las Reglas estipulan 15 días hábiles, lo que, de celebrarse, sería en la semana de Pascua.