La presentación ayer de Tiberio Guarente fue de lo más pintoresca. Si la pasada temporada Zokora fue presentado a los pies de la Giralda y Negredo en la Plaza de España, ésta el departamento de marketing ha elegido Itálica (con más de 30º), una de las colinas que dominan el anfiteatro, para presentar a un italiano, fichaje estrella del verano por ahora. Aún resonaban los sones de la banda sonora de la película ‘Gladiator’ por la megafonía instalada para la ocasión –intercalada con el himno del Centenario– cuando por la colina opuesta una polvareda de humo levantada por una sucesión de coches oscuros –casi parecía la llegada de un jefe de estado– delataba la presencia de los protagonistas. De los coches, por mucho que sonara la música de la oscarizada película, no bajaron ni Russel Crowe ni Máximo Meridio, sino Monchi, Del Nido, Vizcaíno y, cómo no, Guarente, que por mucho ‘Gladiator’ que sonara “tiene nombre de emperador romano” –Del Nido dixit– y “llega para gobernar el juego del Sevilla”.
Aprovechó el presidente, asimismo, para comparar Itálica, “primera ciudad romana creada en España por Publio Cornelio Escipión, ‘El Africano’, el 206 AC, con el Sevilla FC actual, un proyecto indestructible”. No se le pasa a Del Nido un detalle, ni el más mínimo. Él fue quien se encargó de matizarle a Guarente que las cuatro estrellas que luce el escudo de la camiseta de la final de la Copa, una por cada título, ya se quedan atrás. ‘Son ya cinco’, vino a decirle indicando el número con la mano.
