Pero, ¿qué debe tener una investigación, una idea, un nombre o un producto para conseguir una patente? Lo primero es que debe presentar una novedad mundial. "No debe haber ningún otro registro similar en el mundo", explica Cristina Amate. Lo segundo es que debe tener aplicación industrial. Y el tercer requisito es que debe ser el resultado de una actividad inventiva. Aun así, el camino hasta que te conceden la patente no es sencillo.
"Primero ha de acudir al Citpia", comienza a explicar Cristina Amate. "Allí nuestros técnicos le realizan un primer informe de manera gratuita y asesoran al usuario". Luego, unos expertos han de redactar el documento de patente. "Se trata de personas que conocen a la perfección el área en la que se englobaría la patente". Luego se registra y, tras unos 18 meses (periodo en el que el Citpia hace una búsqueda mundial para asegurarse de que no hay registros similares en ningún país), se publica el informe de la solicitud para que otros empresarios o investigadores puedan exponer sus oposiciones. "Y si no hay impedimentos, se concede, siempre y cuando se cumplan los requisitos esenciales", concluye la coordinadora del Citpia.
