El calendario dice que hoy es 4 de junio, un día importante para las hermandades que salen de Sevilla rumbo a Almonte para iniciar, como cada año, la Romería de El Rocío. Se respira un ambiente de alegría, de ilusión por el camino que está a punto de emprenderse. Junto a la Basílica de La Macarena los peregrinos se preparan y ultiman algunos detalles para que la romería salga tal y como la han planeado durante meses: perfecta. Aunque eso es algo que resultaría mucho más difícil si no fuera por la presencia y disponibilidad de unas personas especiales que contribuyen en gran medida a crear este buen clima. Se trata de los voluntarios de Protección Civil, personas que sienten que la mejor inversión que pueden hacer de su tiempo libre es la de poner sus conocimientos al servicio de los demás y ayudar en caso de emergencia. Y es que siempre que se les necesita ahí están ellos, con sus uniformes azul y naranja, solícitos, dispuestos a resolver las dudas, a dar toda la información que se les pida, y a solucionar en un santiamén cualquier imprevisto que surja. Uno de ellos es Alejandro del Vando, quien con su testimonio y su experiencia da a conocer la labor que tanto él como sus colegas voluntarios realizan. ¿Qué fue lo que te animó a ser voluntario de Protección Civil? Me animé porque siempre había tenido la curiosidad de hacer algún tipo de voluntariado pero antes no lo pude hacer: con los estudios de bachiller, la selectividad era complicado. Pero ahora lo puedo compaginar con mis estudios para las oposiciones a las que me voy a presentar, así que he aprovechado la oportunidad. Compagino los estudios con el voluntariado en Protección Civil en mi tiempo libre. Sacar adelante y al mismo tiempo los estudios y el voluntariado, ¿una misión imposible? Hombre, a veces complicado. Depende. Si sale algún tipo de convocatoria que sea de muchas plazas, le tengo que dedicar menos tiempo al voluntariado. A lo mejor le dedico un día a la semana o cada dos semanas un día. Cuando pasa una convocatoria o se prevé que no va a salir convocatoria hago servicios más largos, de más horas y le dedico dos días a la semana. ¿Qué visión tenías de Protección Civil antes de entrar? La misma que tengo ahora porque antes de entrar había leído sobre ella, sobre las agrupaciones de voluntarios y sobre lo que hacían aquí en Sevilla. Sabía a lo que iba. ¿Te ha sorprendido algo? Los compañeros. Puedo decir que tengo buenos compañeros, que he hecho buenas amistades en Protección Civil y que, como se suele decir, son para toda la vida. ¿Cuáles son vuestras funciones como voluntarios? Lo que hacemos principalmente es colaborar con los ciudadanos: damos información a cualquier persona que nos lo pida, ya sea un ciudadano de Sevilla o un extranjero. Además, si surge algún problema avisamos al órgano correspondiente para que lo solucione. ¿Algún ejemplo práctico de labor que lleváis a cabo? Recuerdo a una mujer que nos vino en la velá de Santa Ana con agorafobia. Vio una multitud que no esperaba y se puso tan nerviosa que no sabía para dónde tirar ni qué hacer, comenzó a llorar y a gritar. Acudió a nosotros y como pudimos la tranquilizamos y la intentamos sacar de las calles del centro por donde no había gente, que en ese momento y en ese lugar era bastante complicado. En otra ocasión, cuando hubo un temporal de viento en Sevilla, nos encontramos árboles caídos, contenedores en medio de la carretera.... tuvimos que quitar los obstáculos para los peatones y para los vehículos. ¿En qué tipo de eventos suele participar Protección Civil? En todo gran evento de Sevilla. Como por ejemplo este en el que estamos ahora: el de la salida de las hermandades de Sevilla para iniciar la Romería de El Rocío. También participamos en los pequeños actos. La verdad es que vamos donde se nos dice. En todos estos eventos, ¿quién se encarga de la organización? El Ayuntamiento de Sevilla. A nosotros nos solicitan, vamos al lugar. Ya nos dicen de antemano dónde tenemos que estar. No podemos decidir por cuenta propia qué debemos hacer y qué no. ¿Qué es lo que te más gusta del voluntariado? El sentirme realizado, el poder colaborar con buenas acciones. Porque al dedicar tu tiempo libre a la sociedad hay muchas personas que te lo agradecen. Y con el hecho de que la gente te dé las gracias ya te puedes sentir afortunado. ¿Cuál es entonces la mayor ventaja que ves al voluntariado? Pues que aprendes muchas cosas. Conoces más acerca de los eventos a los que vas porque son siempre situaciones diferentes. ¿Qué es lo que aportáis los jóvenes a Protección Civil? Bueno, en Protección Civil hay tanto mayores como jóvenes. Pero nosotros aportamos nuestra juventud y nuestras ganas de trabajar. ¿Qué tiene que tener un buen voluntario de Protección Civil? Buen trato con la gente, ganas de colaborar y ganas de pasarlo bien, ya que aquí también se viene a conocer gente nueva, a hacer amigos y a echar un buen rato. ¿Se busca un perfil concreto? No. Hay gente que pertenece a distintas ramas del conocimiento y cada uno aporta lo que puede. ¿Qué le dirías a alguien que no sabe si apuntarse o no? Que se anime y que pruebe. Esta es una manera también de conocer a otras personas, de pasarlo bien. Porque al fin y al cabo, después del servicio se quedan las amistades y siempre salimos más tarde el grupo de amigos. Y encima también estás ayudando al ayuntamiento de tu ciudad. ¿Crees que la gente conoce bien lo que hace Protección Civil? No mucho. Todavía la gente no sabe exactamente para qué está Protección Civil ni para qué se creó pero poco a poco se va avanzando. La gente te va preguntando y tú se lo vas explicando. ¿Piensas que hace falta más colaboración ciudadana? Sí. Aunque cada día la gente está más concienciada, se puede colaborar todavía más. Siempre se puede ir a más.
