LACTOSA: Más de un 30% de los sevillanos la padecen
La intolerancia a la lactosa se ha convertido en uno de los problemas de alimentación más habituales del país. En Sevilla se estima que 3 de cada 10 sevillanos padecen esta incapacidad de digerir esta enzima presente en los productos lácteos. Tomar alimentos fermentados como el yogur, los quesos curados, o la leche de soja pueden ser algunas de las alternativas alimentarias para estas personas sin que se supriman las fuentes de calcio necesarias para el organismo.
GLUTEN: En busca de un mercado para celíacos
Los celíacos tienen una intolerancia permanente al gluten, una proteína presente en cereales como el trigo, el centeno, la cebada o la avena. Uno de cada 100 sevillanos sufren esta dolencia que puede llevar a la desnutrición al romperse la mucosa intestinal. Aunque la mayoría de la industria alimentaria usa esta sustancia en sus productos (bollería, pizzas y otros productos), cada vez son más las empresas dedicadas a los productos sin gluten. La legislación del etiquetado de estos es cada vez más estricta.
FARMACOLÓGICA: Compuestos químicos muy necesarios
Los compuestos químicos que surgen de procesos a los que se someten a los alimentos o los aditivos necesarios para su conservación pueden producir en ciertas personas síntomas de intolerancia. Los embutidos, el chocolate, ciertas frutas, el vino o el queso (productos fermentados o madurados) pueden causar vaso dilatación, hinchazón y dolores intestinales, al igual que ciertos conservantes y edulcorantes que son necesarios en los alimentos pero que cada vez se están reduciendo más.
LECHE Y HUEVO: Alérgicos desde la cuna a los 2 años
La alergia a la leche (no materna) y al huevo son dos de las más comunes entre los niños menores de un año. Se trata de una incapacidad para metabolizar proteínas de gran tamaño. Suelen ser alergias que se superan entre los 2 y los 4 años. Los alérgicos a la leche no pueden tomar ningún lácteo. Deben sustituir esta fuente de calcio por vegetales de hoja verde, pescados en conservas o frutos secos. Para los segundos, cuanto más cocinado esté el alimento con huevo, menos peligroso será.
FRUTOS SECOS: Cacahuetes mortales toda la vida
Al contrario que la alergia a la leche o al huevo, la alergia a los frutos secos y a ciertas frutas no desaparecen con la edad. Normalmente suele ser provocada por cacahuetes, algunos frutos exóticos, melocotones o fresas. Aunque en Sevilla la prevalencia no es demasiado alta a este tipo de alergias, en zonas de América del Norte afecta a una gran población. Puede resultar mortal si no se toman las precauciones adecuadas. Las etiquetas deben de aclarar qué cantidad contienen de estos alimentos.
PESCADO: La gastronomía moderna en entredicho
La masa muscular de los pescados blancos como el bacalao o la merluza y mariscos como los langostinos o las gambas pueden provocar alergias a ciertas personas. A éstos se suma la llegada del anisaki, un parásito de estos peces introducido en aguas españolas por la pesca clandestina asiática y que se ha convertido en una importante fuente de alergia. En la cocina actual, con pescados poco cocinados, crudos o en vinagre, cada vez se dan más casos. La solución es cocinar o freír estos alimentos.
