La Feria Agroganadera y Comercial de Los Palacios sale triunfante del temporal

Un total de 4.000 equinos y 500 propietarios han apurado todas las horas del día para hacer los últimos tratos en la antesala de la Feria de Sevilla y la Romería del Rocío, dos escaparates primaverales para ir al galope.

el 18 abr 2010 / 18:58 h.

Algo de mágico y cabal tiene este evento ganadero para que un apretón de manos entre hombres sirva lo mismo que un contrato, una firma y un notario juntos.

Con la de este fin de semana son ya 16 las ediciones organizadas de la feria del ganado palaciega en el centro del Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera y Alimentaria (Ifapa), más conocido como Escuela de Capataces, en cuyos 190.000 metros cuadrados ha habido sitio para el tratante de bestias y para no mancharse los zapatos. Para el primero, hubo corrales por los que mirar, charlar, regatear y comprar o no. Para el segundo, una amplia carpa con expositores que ofrecían todo lo habido y por haber.

Aunque la lluvia apenas ha dado tregua desde el viernes, el temporal ha dado margen a los propietarios para hacer sus tratos, especialmente exóticos en una feria como ésta en la que un apretón de manos basta para hacerse con un caballo o para desprenderse de él. Tal vez por eso, en cada trato se forma un revuelo de hombres alrededor de los dos principales. Hablan a voces, apasionadamente, y produce tensión ver cómo en el último instante en que ambos alargan sus manos para estrechárselas, surgen otras manos para retenerlas, sabedoras de que el apretón vale lo mismo que un sello real. Son esos momentos últimos de las dudas por ambas partes, del recelo postrero, por el pelaje de la yegua o por el color, por el precio, que aquí se establece en duros todavía... Luego, un equipo de veterinarios se encarga de facilitarles y de sellar la guía del ganado. "Yo esas dos yeguas tengo que verlas enganchadas primero", decía Rafael, antes de decidirse a comprarlas. "Esas dos yeguas son lo mejor que hay aquí en la feria", sentenciaba el vendedor, y lo halagaba: "Y si no te gustan a ti, no son para nadie". Ambos dejan de mirarse, como si la posibilidad de trato hubiera terminado, pero...

La feria es también un excelente escaparate para el producto estrella de la tierra: el tomate, para el que la asociación creada al efecto y el propio Ayuntamiento continúan persiguiendo la Indicación Geográfica Protegida (IPG). Para su promoción, se celebró el sábado una gran fritá que hizo las delicias del numeroso público que se puso en cola.

Los organizadores querían, como mínimo, mantener el volumen de negocio en torno a los dos millones de euros y superar las 60.000 visitas. Ayer al mediodía, tenían confirmado que, al menos, se había superado el millón. Mucha pela para la que está cayendo. Los próximos días habrá un balance más ajustado.

  • 1