La historia más rocambolesca y polémica de los últimos años en Sevilla, la retirada irregular de los niños Iván y Sara a su madre, hoy fallecida, sigue in crescendo: la niña, de 17 años, no puede cobrar la herencia materna por estar presa en la República Dominicana. Ese dinero es, precisamente, la indemnización por lo que hizo la Junta.
De momento no ha trascendido la causa de que Sara se encuentre en dicho país y en dicha situación, pero la agencia Efe aseguraba ayer tarde que los hechos son los descritos, y que ésa es la razón por la que la joven no puede presentarse ante la albacea que tiene que repartir entre ella y sus hermanos (entre ellos Iván, que vive de acogida con un matrimonio) los 1,7 millones de euros que recibió la madre, Carmen Fernández, como indemnización por la retirada irregular de ambos niños por parte de la Junta en 1996, hace doce años.
La abogada del matrimonio que acogió en su día a ambos chiquillos, María del Mar Arredondo, explicaba ayer que Sara, que cumplió 17 años en febrero pasado (y que apenas tenía cinco cuando se desató toda esta historia), desea volver a España y cumplir aquí la condena que le corresponda, aunque los trámites necesarios durarán al menos un año.
La letrada dice ignorar las razones por las que Sara está recluida en un correccional dominicano, pero aseguró que Iván, un año menor que su hermana, está al tanto de lo sucedido gracias a una carta de ésta. Además, hasta el año pasado ambos hablaban a menudo por teléfono. Según Arredonda, pese a que la muchacha abandonó voluntariamente a la familia de acogida en 2004 y se fue a vivir a Madrid con su madre, el año pasado estuvo en Sevilla con su hermano y con la pareja que lo tiene encomendado a su custodia.
Sin embargo, a partir de junio de 2007 perdieron todo contacto con Sara, que dejó de responder al móvil. Según Arredonda, todos los demás intentos por contactar con ella a través de conocidos resultaron igualmente infructuosos. Mientras tanto, la familia de acogida está ultimando los trámites para su declaración como tutores legales de Iván.
De todos modos, esos 1,7 millones de euros quizá tarden bastante en salir del juzgado de Familia número 7, donde se encuentran depositados: según fuentes judiciales referidas por la citada agencia, el procedimiento se halla no en el juzgado sino en la Audiencia Provincial de Sevilla, pendiente de un recurso anterior sobre la entrega de parte de la indemnización, del que parece que aún no ha desistido el abogado que defendía a Carmen Fernández.
Pero salvo novedad, Sara, Iván y otros dos hijos que tuvo Carmen Fernández de una relación anterior, deberán repartirse finalmente ese dinero concedido por los tribunales a la madre, fallecida hace cuatro meses, en diciembre pasado, como indemnización por la retirada irregular de la tutela de sus hijos por parte de la Junta de Andalucía en 1996.
Durante los últimos cuatro años, Sara había estado viviendo con su madre en Madrid, aunque se emancipó de ella meses antes del fallecimiento. Segñun Arredondo, la situación actual de prisión es la razón por la que no ha ido a ver a la albacea.
