El Ayuntamiento ha adoptado esta semana una medida sin precedentes en un servicio gestionado por personal municipal: la limpieza de colegios. A partir del próximo lunes, siete centros escolares pasarán a depender exclusivamente de empresas privadas contratadas por la Delegación de Edificios Municipales. La medida, que ha causado un enorme malestar entre los sindicatos, tanto UGT como CCOO, responde, según el Gobierno local, a las carencias de personal existentes en la plantilla municipal que pueden derivar en "graves problemas" de limpieza en algunos de los colegios públicos. Tiene, en cualquier caso, un carácter provisional, y se prolongará sólo hasta el final del primer trimestre escolar, el 22 de diciembre.
Según los datos del edil responsable de Edificios Municipales, Joaquín Díaz, de los 654 empleados asignados a este servicio, el 26,75% no están trabajando en estos momentos por distintos motivos. Hay, según el Gobierno local, 32 plazas vacantes y cinco jubilaciones que no se han cubierto; 16 personas de servicios adaptados -con limitaciones en cuanto a las funciones que pueden desempeñar- ocho liberados sindicales; 59 personas de baja por enfermedad; catorce de permiso; nueve supliendo plazas vacantes en el área de portería y cuatro cubriendo puestos en otras prestaciones municipales.
En uno de los colectivos dependiente de este área -las porterías de los colegios-, hay 33 personas ausentes, 23 por baja médica; nueve por distintos permisos y tres liberados sindicales. "Es una situación de emergencia y teníamos que hacer algo. O contratamos empresas para los días que quedan de curso o dejamos que los colegios se queden sucios y desatendidos hasta el 22 de diciembre", aclaró Joaquín Díaz, quien justificó así los contratos firmados con varias empresas, que han sumado en total unos 20.000 euros y que no han requerido de un concurso público. El delegado de Edificios Municipales incidió en que se trata de una medida provisional, que no tiene vocación de mantenerse en el tiempo. "No hay ninguna intención de privatizar los servicios", subrayó Díaz, quien anunció medidas que se adoptarán a partir de enero: se encargará un estudio a los inspectores de Riesgos Laborales sobre las 59 bajas médicas y se planteará una reestructuración de los permisos concedidos a empleados para evitar que coincidan tantos durante el curso.
Pese a esto, desde la sección sindical de UGT rechazaron con contundencia esta medida y anunciaron movilizaciones a partir de la próxima semana. "Se ha adoptado sin transparencia, sin ni siquiera hablar antes con los sindicatos. Prácticamente a traición. Tememos que esto sea un primer paso para privatizar todo el servicio de limpieza de colegios. No se puede justificar de ninguna forma que se privatice este servicio", apuntaron desde el sindicato.
Los colegios, al igual que los parques y las bibliotecas, se han incluido además en los fondos del plan autonómico de inversiones. Con este dinero se han reforzado los servicios en los centros escolares de forma que hay empresas privadas contratadas por las mañanas, en un turno que no hacía el personal municipal.
