Local

La Mesa de Empleo se debilita a la espera de un impulso político

el 19 nov 2011 / 18:37 h.

TAGS:

Un proyecto de consenso. El pasado 9 de septiembre se constituyó la que debía ser una de las grandes apuestas municipales para luchar contra el desempleo: una mesa general en la que estuvieran representados los empresarios y los sindicatos y cuyo trabajo se dividiría en siete comisiones sectoriales. Las cifras de paro hacían más que necesario este escenario de diálogo en el que Ayuntamiento, patronal y sindicatos pusieron altas expectativas. Se trataba no de buscar soluciones a corto plazo, sino de trazar un modelo de trabajo y de consenso a medio y largo plazo que no existía en el gobierno hasta ahora. Sin embargo, el resultado de momento no ha sido el esperado. "Queremos avanzar, pero a veces parece que no es una mesa de trabajo, sino un foro donde un grupo de personas hacen una lluvia de ideas sin ningún efecto", explican desde CCOO. "Parece que nosotros vamos por un lado y el gobierno por otro", subrayan desde UGT. La percepción de que este escenario ha entrado en barrena demasiado pronto es generalizada. Y prueba de ello es que para reactivarla, el delegado de Empleo, Gregorio Serrano, y su director general han anunciado que a partir de esta semana acudirán ellos a las mesas sectoriales.

 

Sin gobierno. Si todas las partes necesitaban este foro de trabajo y más aún la ciudad ¿por qué se ha llegado a esta situación? Un primer factor lo apuntaron desde el principio los componentes de las mesas: el Consistorio no estaba presente en algunas de las comisiones que había creado. Las dejaba en manos de técnicos o expertos sin ninguna responsabilidad institucional. La consecuencia es que lo allí se proponía, debatía o aprobaba no iba a ningún lado, y que en paralelo el gobierno tomaba medidas. "Podemos proponer muchas cosas pero si no sabemos si hay dotación presupuestaria o si encaja en los planes del gobierno, ¿de qué sirven realmente?", explica uno de los miembros de las comisiones de trabajo.

 

Descoordinación. El planteamiento inicial era que todos los acuerdos municipales que afectaran a la economía y al empleo pasarían por esta mesa. Pero no ha sido así. La comisión de trabajo de industria y sector productivo se encontró un día en los medios con que el área de Relaciones Institucionales que dirige Javier Landa había creado una oficina del plan estratégico para debatir sobre el futuro industrial de la ciudad. Ese día estaba convocada una sesión. Se levantó antes de tiempo y no se ha vuelto a convocar a la espera de que el gobierno dé explicaciones de por qué se ha creado un órgano paralelo sin previo aviso. La mesa de trabajo de economía social no fue consultada ni siquiera avisada de que se iba a presentar un paquete urgente de medidas que fueron por vía de urgencia al pleno del mes de octubre precisamente para reactivar ese sector. Tampoco los responsables de elaborar un plan para los polígonos industriales conocían que el alcalde iba a presentar un proyecto para obtener fondos europeos a los empresarios ni quienes debaten sobre el desarrollo urbanístico sabían que Emvisesa había decidido liquidar el plan municipal de vivienda. En este último caso incluso se habían planteado medidas en la mesa para reactivarlo a través del impulso de iniciativas como alquileres con opción a compra. De momento, no hay alternativas.

 

Pleno. Mientras los sindicatos reclaman que el gobierno local aclare cuál será realmente el papel de esa mesa de trabajo durante este mandato, la oposición ya ha forzado al alcalde a concretar sus políticas de empleo. Porque ese realmente es el objetivo del pleno extraordinario que se celebrará en el Ayuntamiento. De momento, el gobierno ha anunciado algunas medidas como la flexibilización de la concesión de licencias de apertura y la supresión de las tasas a los negocios. Pero casi seis meses después sigue faltando un plan integral de empleo, o una actuación de choque para frenar la sangría de desempleados dentro de los estrechos márgenes con los que cuenta la administración local, sin apenas competencias y con escasos recursos. No fue prioritario en el anterior gobierno y parece que no acaba de serlo en este. Quizá ese Pleno, fuera de periodo electoral, marque un punto de inflexión. Y tal vez por eso hubiera sido un símbolo positivo que se hubiera abordado en la primera sesión ordinaria de trabajo o, al menos, en la primera extraordinaria. Pero el primer Pleno de forma precipitada el gobierno lo centró en la derogación del Plan Centro y en la creación de una comisión de investigación; y el primero extraordinario solicitado por la oposición el PSOE lo dedicará a ese mismo tema: la derogación del sistema de control de accesos y la movilidad en el casco histórico.

En Twitter: jalonso2

  • 1