De verdad que hace un par de semanas creía que aún había Liga, viendo de nuevo cómo anda Messi (16 goles él solito en sus seis últimos partidos) y los apuros del Madrid para sacar sus compromisos lejos del Bernabéu, ahora que llega la fase decisiva en la Champions y se exige a las plantillas de verdad. Pero después de repasar los últimos arbitrajes que le han caído en suerte a los merengues, desisto, no hay nada que hacer: ganaron por la mínima en el Villamarín con ayuda extra, como lo hicieron en Vallecas, en Getafe -clamoroso penal de Pepe no señalado- o en Mallorca, cuando a Víctor le anularon el 2-0 por fuera de juego ¡cuando arrancaba de campo propio! Para nada creo que la liga española sea una #ligademierda como aseguran algunos para esconder sus propios fracasos, y ahí está el Athletic toreando al United, de nuevo líder en la Premier, para corroborarlo. Madrid y Barça, repartos televisivos al margen, cuentan con dos cracks de época como Cristiano y Messi que marcan unas diferencias abismales con los demás, diferencias que no serían para tantísimo si ambos no contarán, encima, con la sempiterna ayuda arbitral. Así sí que no hay manera.
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