La situación de las arcas de los municipios de la provincia de Sevilla va de mal en peor y la Diputación Provincial vuelve a salir al rescate de los ayuntamientos más endeudados para que puedan pagar las nóminas de los trabajadores en el último trimestre del año. Como anunció Fernando Rodríguez Villalobos a mediados de agosto, la institución provincial va a dedicar 10 millones de euros dentro del nuevo Fondo Extraordinario de Anticipos Reintegrables (FEAR) , préstamos sin intereses que los ayuntamientos deberán devolver en 38 meses, los que falta para el fin de la legislatura.
En el pleno extraordinario que se celebra hoy se aprobarán las modificaciones presupuestarias necesarias para proceder a la nueva convocatoria del FEAR, que repartirá los 10 millones entre aquellos ayuntamientos de la provincia que cumplan los requisitos y lo soliciten en un plazo de 10 días naturales desde su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) que como muy tarde será el lunes, con idea de que los pueblos puedan disponer del dinero los últimos días de septiembre o primeros de octubre.
Según explicó ayer el presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, el objetivo es "inyectar liquidez" para que aquellos ayuntamientos con necesidades económicas puedan financiar el Capítulo I, en lo referente a las nóminas de octubre, noviembre y diciembre, así como las pagas extraordinarias y la Seguridad Social, en lo que será "un nuevo balón de oxígeno de la Diputación, que va ganando posiciones de cara a aquellos que no ven con mucha claridad la existencia o no de las diputaciones".
Villalobos destacó que las ayudas no estarán disponibles para todos, sino "para quien realmente lo necesita": "el principio de solidaridad es algo que no se puede poner en tela de juicio", indicó, aprovechando para instar a las administraciones a colaborar y congratulándose de que tanto Junta como Estado contemplen un incremento de su participación en este sentido.
Por su parte, el diputado de Hacienda, González Lora dio cuenta del trabajo técnico del área a raíz de la voluntad por parte del presidente de la Diputación de llevar a cabo la nueva convocatoria, con los informes positivos de la Intervención y la Secretaría General. Teniendo en cuenta que los 104 ayuntamientos de la provincia de Sevilla están "relativamente mal", según González Lora, la Diputación impondrá condiciones para poder optar a esta subvención.
Requisitos. Así, la condición "fundamental" será que el Consistorio solicitante haya contado con un remanente negativo de tesorería en la última liquidación presupuestaria de 2010. Una vez cumplida esta condición, González Lora explicó que podrán optar a la ayuda aquellos pueblos que, a fecha 1 de septiembre, tengan menos del 10% de los anticipos facilitados por el Organismo Provincial de Asistencia Económica y Fiscal (Opaef), retenciones superiores al 25% de los ingresos del Estado o, como novedad, un saldo disponible igual o inferior al 25% de las previsiones anuales de la participación en los tributos de la Junta. Estos requisitos y la cifra de ayuntamientos que finalmente entren en la ayuda -la Diputación calcula entre 30 y 40- serán los que determinen los criterios de reparto de los 10 millones.
Villalobos hizo también referencia al encierro del alcalde de Villaverde del Río, Santiago Jiménez (IU), y una veintena de vecinos en las dependencias de la Diputación. Tras recordar que Jiménez no realizó solicitud de entrevista, dijo que "siempre recibo a alcaldes, porque esta Diputación esta hecha a imagen y semejanza de lo que me han pedido". Además, sobre las demandas de los nuevos alcaldes afirmó que "ya se les han pasado los tres meses iniciales de mandato para enterarse de cómo está el pueblo, y no vale mirar al de atrás". "Hay que darle vueltas a la cabeza, con ayuda de la administración, pero sin llorar, pues lo han votado a usted", les exhortó.
