Un grupo de unos 20 vecinos del bloque desalojado por peligro de derrumbe en la urbanización Jardín Atalaya de Camas irrumpió ayer en el despacho del alcalde, Juan Pazos (IU) para reclamar que libere una compensación de la Junta de 167.000 euros para ayudarles en su desalojo.
Los vecinos, que no han cobrado aún cantidad alguna para apoyarlos en los gastos de reconstrucción del edificio y de alquiler, se concentraron poco después de las nueve de la mañana e irrumpieron en la oficina del regidor camero, aunque la situación nunca llegó a ser tensa y salieron del ayuntamiento con el compromiso verbal de Pazos de atender el pago de las indemnizaciones, apuntaron ayer tanto fuentes de los vecinos como del Consistorio de la ciudad.
Los vecinos, explica uno de los participantes en el asalto al despacho del alcalde, Santiago Soto, "presentamos nuestras quejas porque de manera incomprensible el Ayuntamiento no nos libera la transferencia que ya ha hecho la Junta para ayudarnos".
En esta situación las 36 familias afectadas, que fueron desalojados el 5 de septiembre y que permanecerán largos meses fuera de sus casas hasta que una onerosa obra no reconstruya los desperfectos de su bloque, han tenido que adelantar "9.000 euros por vecino" para acometer los trabajos de micropilotaje del inmueble esta misma semana, la técnica constructiva que puede salvar el inmueble, exponen los propietarios desplazados, repartidos entre pisos de alquiler y casa de familiares.
También tienen que afrontar los gastos de la vigilancia del bloque, de donde salieron casi con lo puesto. Por eso no entienden que, a pesar de haber llegado el dinero de la Junta al Ayuntamiento de Camas, que actúa como intermediario, éste no lo haya liberado todavía. "Nos exigen el recibo de los alquileres, pero algunos caseros no han entregado papel alguno, se quejan los afectados.
"Forzamos al alcalde a que saliera de su despacho, y logramos superar el desencuentro de los primeros momentos: se ha comprometido de forma verbal, después de hablar con nosotros durante 30 minutos, a que agilizará la entrega de las ayudas".
Desde el Ayuntamiento, fuentes oficiales del Consistorio explicaron que han sido "seis vecinos" los responsables del retraso en la entrega de las ayudas, "porque no han entregado documento alguno que acredite la propiedad de la vivienda", unos papeles que el interventor municipal exige para que el Consistorio tenga certeza de que no subvenciona a nadie externo al bloque. "Los vecinos se han comprometido a entregar hoy mismo la documentación que falta", expusieron las mismas fuentes.
"Los comprendemos". El Ayuntamiento agregó que "comprende" la desesperación de los vecinos, y recordaron que el alcalde desatendió otras obligaciones para dedicarles un rato "sin cita y de la forma en la que se presentaron". De todas formas, expusieron estas fuentes municipales, "la intención de Pazos es reunir de forma urgente a la junta de gobierno local para efectuar cuanto antes el pago a los vecinos". Eso sí, los seis rezagados tienen que entregar cuanto antes la documentación "porque si no se retrasa el pago para todos los afectados", agregaron.
