La asociación de familiares de presos de ETA Etxerat ha convocado para el 2 de enero una manifestación en Bilbao tras un año que han calificado de "difícil para la solidaridad", con "ataques constantes" como "la desaparición de las ayudas" que recibían del Gobierno Vasco y "la cruzada de Ares contra las fotos" de los reclusos.
Etxerat ha reunido hoy a varios centenares de personas en su IX Asamblea Nacional, que ha tenido lugar en el teatro Leidor de Tolosa y a cuya clausura han acudido, entre otros, la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, y los dirigentes de Aralar Jon Abril y Rebeka Ubera.
Natxi Aranburu y Jone Artola han leído en euskera y castellano un escrito, en el que se destaca que la "cohesión interna" ha sido uno de los "principales ejes" de esta reunión, además de suponer "una de las herramientas fundamentales para poner fin a la criminal política penitenciaria vigente".
"Piensan que intentando romper la unidad de las familias van a acabar con el colectivo de presos. Se equivocan, no van a conseguir absolutamente nada", ha señalado Artola, quien ha incluido entre los "ataques" de los últimos meses "la amenaza de ilegalización de Etxerat", además de "los accidentes de tráfico y los cacheos a familiares".
Ha denunciado igualmente la supresión de las "ayudas mínimas" que antes recibía de los ejecutivos nacionalistas y que ha suspendido el Gobierno de Patxi López, así como la retirada de fotos de los reclusos etarras de lugares públicos, ordenada por el consejero de Interior, Rodolfo Ares.
Esta asociación quiere generar ahora "una ola de solidaridad" hacia los presos de ETA "junto a multitud de agentes sindicales, políticos y sociales de Euskal Herria".
Etxerat entiende que "hay que dar pasos adelante" y por ello ha convocado la manifestación del 2 de enero bajo el lema en euskera "Presos vascos a Euskal Herria. Dueños de sus derechos".
