Cuatro jóvenes hippies se reúnen en la Cartuja para contar cómo son.
Ya lo dijo Bob Marley: no te preocupes y sé feliz. Ésa es precisamente la filosofía que profesan las jóvenes de esta tribu urbana aquí presentes. Ellas pretenden encontrar el equilibrio y la paz interior. María, Azahara, Laura y Alba, de edades comprendidas entre 23 y 24 años, han compartido con El Correo las aficiones, inquietudes, preferencias y estilos que caracterizan a la tribu de los hippies.
A ritmo de reggae, ska y drum and bass, su mayor afición es pasar las horas en compañía de amigos en algún bar o rincón de la Alameda de Hércules, la Alfalfa o a orillas del río Guadalquivir; cualquiera de estos lugares sevillanos es adecuado para beber cerveza, hacer malabares con las mazas, jugar con los palos chinos, bailar las cariocas, leer, charlar y, sobre todo, reír.
Las componentes de esta tribu son personas sociables, divertidas e idealistas, que contradicen el título de la obra de teatro de Fernando Fernán Gómez Las bicicletas son para el verano, pues es su medio de transporte habitual durante todo el año.
No profesan ningún tipo de religión, y su ideología política es de izquierdas. "Soy tolerante con todo el mundo sea cual sea su ideología, pero también soy bastante intransigente con aquellas personas que no respetan a los demás", dice Azahara.
No tienen ningún tipo de prejuicios ante la homosexualidad. "Cada uno que haga lo que quiera con su vida mientras no interfiera en la libertad del otro", argumenta Laura, quien mantiene una relación con Azahara desde hace cuatro años, por lo que su postura ante la homosexualidad, al igual que la del resto del grupo, queda bastante clara: la apoyan y la respetan. Y por supuesto defienden el sexo antes del matrimonio. "Creo que es totalmente obligatorio", recalca María, a lo que le sigue Alba: "Creo que el sexo es obligatorio siempre, tanto antes como después del matrimonio."
Su estilo es bastante cómodo: ropas anchas, zapatillas planas, chanclas, sudaderas, todo aquello que les permita sentirse bien en cualquier sitio. Suelen comprar sus prendas de vestir en mercados, rastrillos y tiendas de segunda mano, ya que no les importa tanto la estética como la comodidad, y va contra sus principios gastar dinero en ropas caras o pagar ningún tipo de marcas. Puede parecer tópico decir que los hippies llevan rastas, ya que no es condición obligatoria, pero es cierto que una gran mayoría suele decantarse por ese estilo. Sin embargo, es una opción de peinado que a veces trae consecuencias, pues como afirma María, "a veces me han mirado mal o no me han dado un trabajo por el hecho de llevar el pelo con rastas". Parece que en la sociedad aún quedan muchos prejuicios por el estilo que una persona elija para vestirse o llevar el pelo.
Dado que sus estudios están normalmente relacionados con el mundo audiovisual, no es de extrañar que sean apasionadas del cine, así como lo son de la música, razón por la cual suelen estar presentes en los festivales musicales de toda España, huyendo de de fiestas como la Semana Santa y la Feria de Abril.
Pero que pertenezcan a una tribu y tengan aficiones o estilos comunes no quiere decir que todas estén cortadas por un mismo patrón; son personas y cada persona es un mundo, eso no debemos olvidarlo. Así pues, Alba, por ejemplo, adora el mundo de las artes escénicas y participa con un grupo de teatro universitario en el montaje y la puesta en escena de obras clásicas, y Azahara es una apasionada de la literatura, y pasa horas enteras leyendo grandes libros que le aportan nuevos conocimientos y visiones acerca del mundo. Son hippies, sí, pero son personas. No están encasilladas en ningún prototipo, porque como cualquier humano, ríen, lloran, tiran la basura, ponen la mesa, y se relacionan con todo tipo de gente.
Don't worry, be happy, dijo Marley. La única religión con un solo mandamiento.
De utilidad:
Qué: Tribus urbanas, hippies.
Dónde: Puede encontrar a esta tribu en La Alameda de Hércules, en La Plaza del Salvador, en La Alfalfa o a orillas del río Guadalquivir.
Tiendas: Mercadillos, rastrillos y tiendas de segunda mano son los lugares donde suelen comprar sus prendas de vestir.
Música: Reggae, drum and bass, ska, rock and roll y algo de electrónica son los estilos musicales que escuchan, de grupos protagonistas en festivales y raves.
Preferencias ideológicas: La izquierda, el sexo, la libertad a ultranza, el respeto a la diferencia, y la oposición al consumismo.
