La viñetas con colorines chillones y las historietas de superheroes y villanos cada vez están más consolidadas entre un público que ronda la treintena y busca la añoranza de una época donde estos cómics tenían una fuerte presencia: "Los años 60 fueron la época de explosión del sector", comenta Juan Gordillo, dueño de la tienda especializada en el sector "Cards and comics". Aunque también hay mucho público joven interesado en nuevas sagas que reinventan el género.
Para iniciarse en el mundo del cómic hay que conocer los dos tipos de cómics más populares: "Los de Marvel están centrados en los superhéroes y suelen ser colecciones bastante extensas. Además cuentan con un protagonista claro", narra Gordillo. Un ejemplo claro de ellos son los X-Men o Superman. Sin embargo, los "manga" son un género con una temática que va desde la fantasía hasta lo erótico pasando por el mundo imaginario de las hadas. Además, el ritmo narrativo es mucho más lento y "necesita de un mayor número de páginas que los de Marvel para explicar la personalidad de los personajes" según Alberto Blázquez, coleccionista de mangas.
Otra de las cosas distintas del género que pueden sorprendernos es su propia lectura. Los "manga" traducidos a nuestro idioma respetan las normas del japonés en la dirección de los textos y por tanto debemos leerlos de derecha a izquierda, en lugar de como estamos acostumbrados en occidente.
Uno de los títulos más buscados por los aficionados del género es "Naruto", que cuenta la historia de una joven hiperactiva que busca convertirse en ninja. La historía ha sido también llevada al "anime" o serie animada. La adaptación de los cómics a televisión o al cine "suelen animar las ventas e impulsar el merchandising", señala Juan.
Entre los títulos curiosos que nos podemos encontrar destaca Supergirl, la versión femenina de Superman "en una versión clásica de los 90", destaca Juan Ramos, aficionado a la saga. "Esta heroína es la prima de Superman y aparece mucho más tarde, aunque con los mismos superpoderes", explica Ramos.
Las colecciones tienen una presentación excelente: "Antiguamente, ante la escasez de piezas antigüas se potenciaba la venta de cómics de segunda mano", señala Gordillo, pero la gran demanda de los seguidores no ha dejado indiferente a las grandes compañías que han reeditado títulos antiguos con una mayor calidad gráfica y un diseño muy atractivo.
