Manolo Jiménez ha señalado que el Sevilla, su rival este domingo en el estadio de La Romareda y al que entrenó tiempo atrás, ha recobrado la fortaleza que parecía haber perdido en temporadas anteriores. "Sabemos de la dificultad de un muy buen equipo, que está haciendo las cosas muy bien y que de la mano de Míchel, que está realizando muy buen trabajo, está muy fuerte", ha comentado en rueda de prensa.
Sobre si afronta el encuentro de una manera especial por su pasado sevillista, el de El Arahal dice lo siguiente: "Mi pasado lo determina mi carnet del Sevila, pero es más importante mi carnet de entrenador y ahora estoy en el Real Zaragoza. Voy a poner toda mi experiencia al servicio de este club para intentar ganar".
Jiménez considera que la banda derecha del Sevilla es muy fuerte, con Navas y Cicinho, "de lo mejor que hay en el fútbol europeo", pero que la izquierda "no es nada floja". "Tiene un lateral izquierdo como Fernando Navarro muy defensivo y muy profesional que le da una regularidad impresionante al equipo y por delante de él pueden jugar Perotti, Del Moral o Reyes", ha advertido.
También destaca que el conjunto nervionense posee muy buen centro del campo y que en la delantera tiene mucha peligrosidad con Negredo. "Yo animé a Del Nido y a Monchi para fichar le cuando teníamos a Luis Fabiano y Kanouté. Es un excelente delantero que aglutina fuerza y calidad y que es un incordio para cualquier defensa", recalca.
A pesar de la fortaleza del rival, el técnico del equipo maño cree que si el centro del campo de su equipo es capaz de jugar como en el partido de la pasada jornada contra el Granada no tiene que envidiarle nada "a casi nadie". Precisamente, sobre la victoria contra el conjunto andaluz, ha resaltado que los triunfos "dan tranquilidad y son un analgésico impresionante".
Además, ha apuntado que el triunfo ante el Granada da al Zaragoza "motivación" para buscar otra victoria y que el equipo, tras lo ocurrido la pasada temporada, se ha convertido en un "especialista" en jugar finales y que esa es la forma en la que deben tomar cada partido de los que quedan hasta el final de la campaña. "Nos va bien ese papel de ir partido a partido y de encararlo como si fuese una final o el último", dice.
