La resaca por el pésimo arbitraje de Muñiz Fernández en Valencia centró ayer buena parte de la tertulia deportiva de la radio del club heliopolitano. El presidente bético, Miguel Guillén, no quiso pronunciarse sobre si el colegiado debe ser sancionado, aunque criticó sus decisiones: "Es cierto que un árbitro se puede equivocar en décimas de segundo, en ver si una jugada es fuera o dentro del área, pero sorprende que no se apliquen los mismos criterios para todos los equipos", señaló. Lo que sí hizo Guillén fue abogar porque en el fútbol se empiecen a utilizar medios tecnológicos para las jugadas de área: "El Real Betis y su consejo de administración han apoyado en más de una ocasión dentro de la RFEF el uso de medios tecnológicos o que haya árbitros destinados a observar las jugadas que se dan dentro del área" dijo, y añadió que "la tecnología es algo necesario, sobre todo cuando hay decisiones que perjudican de una manera llamativa los intereses deportivos y económicos de un club". El mandatario bético "fastidiado después de los acontecimientos del último partido", afirmó que "entendemos que el sistema debe tener alguna herramienta que aporte una solución, que te permita recurrir. Al igual que recurrimos la tarjeta roja a Amaya, nos gustaría poder recurrir los tres puntos. El error humano debe ser contrarrestado". Guillén reconoció, sin embargo, que no todos los clubes están de acuerdo, e insistió en que "con las consecuencias que conlleva un error de estas características, lo mejor para el espectáculo y el deporte competitivo son las medidas, que se deben tomar cuanto antes". Europa. El presidente habló también de lo que significaría para el club entrar en competiciones europeas: "Al Betis le supone muchísimo, a la afición y a todos los que componemos hoy en día el Real Betis Balompié. Lo vería como algo justo y necesario por lo que es el Betis, por su historia y tradición. Sería una medicina para todos nosotros después de lo que hemos sufrido". Y habló de lo que supondría económicamente, tanto en ingresos como en gastos: "Es una posibilidad de tener ingresos adicionales que conllevarían buscar el equilibrio entre seguir creciendo deportivamente y seguir saneando el club como hasta ahora. Luego están las decisiones que tomemos para intentar competir lo máximo posible y con la mayor dignidad, en Europa League o Champions. Debemos asegurar que las inversiones que se hagan no tengan perjuicio para el calendario de pagos establecido". Sea cual sea el final de esta temporada, el presidente bético se mostró más que satisfecho con lo ya alcanzado: "A partir del momento en que se consiguen los 43 puntos en marzo y clasificados durante toda la campaña en puestos europeos, con buen fútbol y reconocimiento de otros equipos, ya es un éxito de todos, empezando por la afición". También habló del futuro de la cantera: "Heliópolis es 100% factible. Dentro de poco será una necesidad de todos los clubes. Salvo dos, todos tomarán el mismo camino". Afirmó que la situación del filial se debe a que el bloque ha ido saliendo y entrando en el primer equipo, con lo que "la misión principal la está consiguiendo con creces", y dijo que el próximo año "se analizarán las medidas a tomar". Vestuario. El presidente destacó la profesionalidad de la plantilla verdiblanca: "Estoy orgulloso de nuestro vestuario. Es un vestuario muy sano. Son conscientes de la situación que atravesamos, unos profesionales. Cuando llegamos no era el mismo. Es importante en épocas de dificultad, que exista ese compromiso e implicación, que los futbolistas sean capaces de olvidarse del yo y ver que su nómina se la han tocado, hablar con sus abogados para ver cuándo se va a cobrar una deuda y cuánto, y dar el máximo es difícil. Hay que ser muy profesional y estar muy implicado. Los nuestros lo han demostrado". Próxima temporada. Por último, habló del equipo del próximo año, en especial de la continuidad de las cesiones de Campbell, Juan Carlos y Pabón, y destacó que "lucharemos por que se queden los que queremos. Si no puede ser, habrá que encontrar de nuevo ese equilibrio entre canteranos, los cedidos, los que tienen contrato y las incorporaciones dentro de unos límites económicos", para lo que "hay confianza en la secretaría técnica". Así, reseñó que "el hecho de que no sabemos en el lugar que acabará la temporada el Betis, puede determinar mucho la decisión que podrían tomar un club o un fondo de inversión".
