La Federación de Asociaciones de Vecinos Unidad Nazarena está impartiendo formación a voluntarios para trabajar con los colectivos más necesitados de Dos Hermanas. Participan en un programa que pretende ayudar a las asociaciones de vecinos a tratar los problemas propios de cada una de las barriadas de la ciudad.
Varios colectivos de la ciudad se dieron cita en la sede de la Asociación de Vecinos Miguel Hernández, en la barriada de El Chaparral, para participar en las jornadas organizadas por Unidad Nazarena, en el marco del programa Formación de Voluntarios en Acompañamiento Social de la Confederación de Asociaciones de Vecinos de Andalucía (CAVA), que está subvencionado por La Caixa.
La presidenta de la CAVA, María Dolores Rincón, expuso que el programa pretende formar una red de voluntarios de las asociaciones de vecinos para que puedan realizar actividades de dinamización con los grupos con mayores problemas de cada barrio y en riesgo de exclusión social sin que tengan que contratar monitores o trabajadores sociales para estas tareas.
En las jornadas se dieron algunos consejos para actuar ante distintos problemas. De este modo, en barriadas como Los Montecillos, donde residen familias de etnia gitana y un gran número de personas analfabetas, se sugirió llevar a cabo diversos programas con los que los vecinos puedan aprender al mismo tiempo que se divierten.
Para otros barrios donde vive gente humilde que pasa muchas horas en su lugar de trabajo, como Ciudad Blanca, están más recomendadas actividades relacionadas con la organización y la preparación de propuestas para fomentar la cohesión y que el grupo pueda moverse "por sí solo", según explicaron desde la CAVA.
El objetivo final es que los voluntarios que participen en las jornadas se incorporen, una vez formados, a programas de la CAVA como Juntos Recuperamos el Barrio, que desarrolla en Los Potros la trabajadora social Vanesa Francés.
En este barrio, según cuenta la trabajadora social, se está trabajando "la integración y la movilidad de las mujeres, que son las que de momento participan en el programa". En este sentido, detalla que estas mujeres "cada vez se sienten más realizadas" algo que, según reconoce, "está costando" porque "casi todas tienen hijos y no tienen con quién dejarlos".
La trabajadora social precisa, por último, que estos programas no son exclusivos para los puntos con más marginación de la ciudad.
