El derbi del miedo. Muchísimo en juego para el Cajasol y el CB Granada. Nada menos que la permanencia y en el caso de la entidad sevillana, probablemente su propia existencia. El presidente cajista, Juan Carlos Ollero, así lo dejó entrever ayer en un encuentro con los medios en el que solicitó el apoyo cerrado al equipo para "un partido decisivo".
Decía Ollero que en el transcurso de la eterna reflexión sobre las causas por las que en Sevilla no acaba de romper nunca el baloncesto como debiera, "nos encontramos con la necesidad de acudir a la ciudad para pedir su apoyo en un partido decisivo. Nos jugamos veinte años de baloncesto en Sevilla", dijo envolviendo su llamamiento con el dramatismo que rodea al partido del próximo domingo en San Pablo (12.30), solicitando un apoyo de la afición masivo e incondicional para la cita más angustiosa, probablemente, de la historia de la entidad sevillana.
"Es muy importante que la afición esté con el equipo y que consigamos la victoria, que ya habrá tiempo para expresar las críticas hacia quien consideren oportuno", solicitó el máximo responsable del club, quien admitió "la debilidad de ánimo" que ha mostrado esta plantilla a lo largo de la temporada en ambientes fríos o críticos en casa.
Ollero desveló que se reunió con los jugadores y los técnicos tras la ruborizante, por las formas, derrota ante Pamesa. "No hace falta que volvamos a repetir esa conversación. Son jugadores profesionales y conscientes de lo que se está jugando el club", asumiendo sin tapujos, aunque con términos edulcorados, la declaración del técnico, Manel Comas, tras el choque ante los valencianos, en la que afirmó que había sentido vergüenza. "El espectáculo que dimos fue para darle la razón a Manel, porque el equipo desapareció incomprensiblemente, y eso no puede volver a suceder".
Luego, sí atendió algunas cuestiones relativas al decepcionante rendimiento de un plantel construido para devolver a la franquicia a una posición relevante. "A mí no me sorprende, por mi experiencia sé que en el deporte es más difícil que las expectativas se cumplan, es más complicado establecer diagnósticos y provocar los éxitos". "Estamos cubriendo etapas, espero que eso se comprenda, no hay varitas mágicas y un equipo ACB de la parte alta no se consigue de un año para otro, y en ese camino se cometen errores. Lo importante es no cejar en el empeño", justificó Ollero.
Por su parte, el director de marketing del club, Chus Llano, incidió en que el domingo "está en juego algo que pertenece a todos los sevillanos" y de ahí el lema de la campaña 'Defiende Sevilla', que luce en las camisetas que regalará la entidad a los abonados y acompañantes en el partido contra el Granada. Además, la iniciativa incluye un paquete especial de precios de tal forma que adquiriendo un ticket para el domingo, el choque posterior ante Unicaja, último en casa, saldrá al 50% del precio. También han lanzado entradas para menores de 16 años a 6 euros.
