por un presunto delito de robo con fuerza en las cosas, cuando desmantelaban la estructura metálica de un complejo industrial.
Según un comunicado del Instituto Armado, los hechos se inician en el cruce de las carreteras A-8055 y A-8054, donde una de las patrullas observa un vehículo que realiza una maniobra peligrosa, por lo que deciden realizar un seguimiento de éste, que los conduce hacia el interior de un complejo industrial, actualmente en desuso, dedicado a la elaboración de componentes de hormigón.
Una vez en el interior del complejo, los agentes observan que parte de la estructura metálica que soporta la cubierta de las naves, consistentes en pilares metálicos de gran tonelaje y complejas construcciones de hierro, habían sido cortadas con sopletes de gran potencia y se encontraban dispersos por el lugar.
También había varias escaleras y herramientas, con signos de haber sido abandonados precipitadamente, y tres furgones cargados con miles de kilos de los hierros arrancados a las naves. Los daños causados están valorados en más de 15.000 euros.
Por este motivo, la Guardia Civil cierra el complejo, y localiza a ocho personas escondidas en su interior, quien una vez interrogadas, reconocen ser los autores del corte y sustracción de los pilares y estructuras metálicas cargadas en las furgonetas. Finalmente, son detenidos por un delito de robo con fuerza en las cosas G.B.B., S.B.S., J.D.B., J.J.P.C., J.M.P.M, J.L.A.J., A.J.P., y L.M.C.A., todos ellos con numerosos antecedentes penales y policiales.
