Local

Ocio sin niños cerca

Los hoteles y restaurantes ‘Adults Only’ llegan a la ciudad, un producto enfocado a viajeros que buscan ambientes tranquilos empezando por los vagones silenciosos del AVE, de los que ya se han vendido 13.500 billetes desde julio

el 22 sep 2014 / 11:45 h.

TAGS:

Es una tendencia iniciada en resort de lujo del Caribe u otros destinos de islas o costas con gran afluencia de parejas de recién casados o que buscan un rincón romántico donde celebrar aniversarios o escapadas íntimas, pero ya se ha extendido a entornos urbanos dirigida a viajeros de trabajo o un perfil específico de turista que busca tranquilidad. A los locales gay friendly, aptos para mascotas o diseñados específicamente para el público infantil se une ahora justamente el negocio opuesto:los hoteles o servicios adults only, reservados solo a adultos a los que venden paz, silencio y tranquilidad algo que, hay que reconocerlo, es incontrolable con niños cerca. Todos los AVE Sevilla-Madrid cuentan con un vagón silencioso donde no acceden niños, no se puede hablar por el móvil y hay que silenciar los aparatos. / Foto: Carlos Hernández Todos los AVE Sevilla-Madrid cuentan con un vagón silencioso donde no acceden niños, no se puede hablar por el móvil y hay que silenciar los aparatos. / Foto: Carlos Hernández Si el pasado 7 de julio Renfe inauguró los llamados coches silenciosos en el AVE Sevilla-Madrid, donde entre otras medidas no pueden viajar menores de 14 años, la semana pasada abrió sus puertas en la capital el Hotel Boutique Palacio Pinello, el primero en Sevilla enmarcado en la tipología de establecimientos adults only, una tendencia a la que ahora empiezan a sumarse los establecimientos y servicios turísticos pero que ya existe desde hace año en los clubes privados con zonas de acceso restringido a los niños. En el caso de los vagones silenciosos de Renfe, que tras estrenarse en los AVE Sevilla-Madrid se han implantado progresivamente en otras líneas (la última en el Madrid-Valencia hace una semana), cada tren tiene reservado un coche situado en el extremo «para evitar el paso de otros viajeros o del servicio de catering» señalizado como tal y, de momento, comercializado sin coste adicional. Además de no permitir el acceso a menores de 14 años, en este vagón está prohibido hablar por el móvil, hay que silenciar los dispositivos electrónicos y usar auriculares. La luz es tenue y se limitan a lo imprescindible los mensajes por megafonía (el personal da la información). Tampoco pasa el servicio de bar ni venta a bordo. Sus clientes buscan poder concentrarse para trabajar y leer o relajarse y descansar. Desde su puesta en marcha se han vendido 97.000 billetes de este vagón, un 14 por ciento en el AVE Sevilla-Madrid (13.580 billetes), curiosamente la línea con menos demanda ya que la mitad corresponde al Madrid-Barcelona, el 20 por ciento al Madrid-Alicante y un 15 por ciento al Madrid-Málaga. Rocío Sutil es la directora del nuevo hotel Palacio Pinello y deja claro que en éste no se prohíbe la entrada a nadie, simplemente es un hotel «recomendado» para mayores de 16 años porque «está diseñado para ese público». Sus 24 habitaciones son dobles con cama de matrimonio, no cuentan con cunas ni camas supletorios, no hay juegos infantiles ni espacios de esparcimiento para niños y el futuro restaurante, que estará abierto al público en general y no solo a clientes del hotel, también seguirá esta línea y no contará con menú infantil. Su público objetivo es un cliente de nivel medio-alto, entre semana fundamentalmente en viaje de trabajo y los fines de semana turistas. «Es una característica diferenciadora que aunque es un formato novedoso en Sevilla ya se ha probado en otros ciudades y ha funcionado», señala la directora que, no obstante, a la hora de vender su producto subraya que más que el concepto adults only, su punto fuerte es «la ubicación» –en pleno casco antiguo– y el «carácter histórico del edificio», una casa palacio del siglo XVI remodelada para su nuevo uso pero conservando sus artesonados y demás ornamentos originales. Frente a esta iniciativa pionera en el ámbito hotelero, el presidente de los hosteleros sevillanos, Pedro Sánchez Cuerda, reconoce que a los bares y restaurantes de la ciudad no ha llegado aún esta tendencia si bien considera «aplaudible» que «cada uno busque su target e igual que hay negocios para niños, gays o que admiten perros, por qué no va a haber establecimientos para ese público que busca silencio y tranquilidad. Luego el mercado ya te dice si has acertado o no». Solo en los clubes privados, probablemente los primeros en segmentar zonas de sus instalaciones para distintos públicos, existen restaurantes que no permiten acceso a menores. Es el caso del Real Club Pineda, donde todas las instalaciones de la Casa Club, el centro social propiamente dicho que incluye un restaurante y una cafetería terraza, tienen el acceso restringido a menores de 14 años. Según explican sus responsables, estos espacios son usados en general por «gente mayor o socios que buscan tranquilidad, por ejemplo, para cerrar un negocio». En el resto de las instalaciones no solo pueden entrar los niños sino que hay zonas específicamente infantiles. Al margen del debate social que esta nueva tendencia puede general, la jefa de los servicios jurídicos de Facua, Rocío Algeciras, reconoce que solo si se prohibiera expresamente el acceso a menores cabrían dudas legales ya que el Decreto andaluz que regula el derecho de admisión prohíbe expresamente la discriminación por edad. En el caso de los clubes privados, el socio acepta las condiciones y en el AVE «el servicio no se ve alterado porque vas en otro vagón del mismo tren con el mismo horario y al mismo precio». La única duda surge con los hoteles, pero de momento apelan a la mera «recomendación».

  • 1