Local

Pérez Villalta pintará el paño de la Verónica del Valle

el 25 feb 2011 / 17:35 h.

TAGS:

Guillermo Pérez Villalta.

Guillermo Pérez Villalta será el encargado de completar este año con sus pinceles la escenografía del segundo de los pasos de la cofradía del Valle . La corporación del Jueves Santo le ha encargado la realización del paño de la Santa Mujer Verónica que enjuga cada Jueves Santo el sudor de Cristo en el paso de la Calle de la Amargura. De esta forma, se da continuidad a una bella tradición, iniciada en el año 1980, según la cual, cada año es un pintor distinto el que plasma el rostro de Cristo en el lienzo que porta en sus manos la Mujer Verónica .

Desde que en 1980 el pintor Francisco Maireles inaugurase esta tradición, la colección de paños de la Verónica de la hermandad del Valle se ha ido incrementando año a año con la aportación de pintores, escultores y artistas de reconocido prestigio. En esa colección de lienzos, que forma parte del museo de la hermandad, figuran firmas como las de Magdalena Leroux,Francisco García Gómez, Ricardo Comas, Francisco Borras, Juan Valdés, Antonio Zambrana, Juan Roldán, Ignacio Cortés, Justo García Girón, María José Solís, Luis Alvarez Duarte, Juan Antonio Huguet y Maria José García del Moral.

Perfil
Guilermo Pérez Villalta, en 1985 recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas. Comenzó a estudiar Arquitectura, una disciplina que ha seguido influenciando su obra pictórica si bien abandonó los estudios para pintar.

En 1968 se trasladó a Madrid, donde en la década de 1980 se lo consideró integrante de la llamada movida madrileña. Ya en los 70 conformó un estilo «manierista» de colorido y figuras deformadas en contorsiones. A mediados de los 80, fue hacia un colorido más cálido y «sucio», con una técnica más suelta.

Frente a los valores de cierta la modernidad abstracta (autenticidad de los materiales y pureza formal), la pintura de Villalta es de naturaleza totalmente narrativa, como se aprecia en sus obras Grupo de personas en un atrio (1976; Museo Reina Sofía de Madrid), Gente a la salida de un concierto rock, La pintura como vellocino de oro (1981-1982), Historia Natural (1987), Sansón y Dalila y Santuario (1996). Su interés por temas mitológicos y religiosos le distingue de la corriente mayoritaria de la pintura . Es un artista fiel al estudio de la tradición, con tendencia a una ornamentación abigarrada y a una exuberancia que inspira optimismo (o nostalgia por un pasado idealizado).

Defensor de la belleza como disfrute y como «necesaria para vivir», Pérez Villalta no oculta su afán por lo ornamental (en oposición al arte minimalista) y aunque a veces sea provocador y roce el escándalo, sigue métodos de diseño y producción tradicionales: múltiples bocetos, técnica depurada de lenta ejecución... Acusa influencias dispares y se confiesa admirador no sólo de maestros antiguos, sino también de Giorgio de Chirico, Marcel Duchamp y Dalí.

Ha ilustrado varios libros, como Faetón del Conde de Villamediana, La Odisea de Homero y Los viajes de Gulliver de Jonathan Swift. En 2006 se publicó el libro Idea, que reunía bocetos de años anteriores. Además, ya desde los años 70 ha diversificado su producción, creando grabados en aguafuerte y litografía, y diseñando escenografías para teatro, cerámicas, muebles, tapices, estatuillas de bronce e incluso un monumento ecuestre (El instante preciso) para el tejado del Ayuntamiento de Granada. Reivindicando su condición de «artífice», más que de simple pintor, Pérez Villalta ha llevado una antológica de su producción no-pictórica (Artífice) en 2006-07, por diversas ciudades de Andalucía. Esta exposición recaló en 2008 en el Museo Colecciones ICO de Madrid.

Está presente en colecciones como: Museo Reina Sofía de Madrid, Museo de Bellas Artes de Bilbao, Fundación Juan March de Palma de Mallorca, Fundación Suñol de Barcelona, Patio Herreriano de Valladolid... En 1985 recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas.

  • 1