El Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra llevará a cabo una importante intervención en las dos áreas de infravivienda con las que cuenta la ciudad: junto a Torreblanca y la Vereda del Cerero. La actuación prevé mejoras laborales, educativas y sociales para las cerca de 80 familias que viven en estas chabolas.
Se trata de la mayor actuación que llevará a cabo en este terreno. El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) publicó ayer la aprobación del expediente de contratación para elaborar un proyecto de intervención en estos dos asentamientos.
Desde el municipio reconocen que es necesario erradicar estos asentamientos, pero ante la dificultad que este proceso conlleva y ante las situación tan precaria en la que viven estas familias, se optará en primer lugar por llevar a cabo una intervención de este tipo. El programa cuenta con un presupuesto de licitación de 253.000 euros y se desarrollará a lo largo de tres años con un objetivo prioritario: erradicar el absentismo escolar, que es muy elevado en ambos poblados.
También se actuará con cada familia de forma individual para detectar sus principales carencias y necesidades. Hoy día desde la Concejalía de Servicios Sociales ya se trabaja con ellas para tramitarles el salario social y está en marcha un programa de vacunación dirigido a los niños.
Pero ahora se pretende llegar a más familias y de forma diferente, es decir, se actuará en la formación de los adultos para que puedan incorporarse al mercado del trabajo y se hará una importante campaña de salud y de alimentación, para que todos los pobladores adquieran hábitos saludables en su vida diaria.
Precisamente, hace unos meses se llevó a cabo otra intervención muy distinta. En aquella ocasión se procedió a eliminar las chabolas que se habían quedado vacías para evitar que llegaran nuevos ocupantes. En total se destruyeron siete en el asentamiento junto a Torreblanca.
Los propios residentes del lugar reconocen que muchas de las chabolas están desocupadas casi todo el año y que sus habitantes, en su mayoría portugueses, las ocupan durante la Feria de Sevilla y las fiestas de las poblaciones de los alrededores.
El asentamiento ubicado junto a Torreblanca cuenta con unas 30 ó 40 familias que viven durante todo el año. Como en el poblado no existe ningún tipo de asociación, los responsables municipales están siendo ayudados por distintos colectivos que están en contacto con ellos gracias a personas con cierta influencia en el lugar, así como con organizaciones no gubernamentales (ONG) que actúan en el poblado y son aceptadas por estos vecinos. Es el caso de un sacerdote y de personas que trabajan en Cáritas, colaboran para poder vacunar a los niños, lo que da una idea del nivel de abandono del lugar.
Mientras, en el poblado de la Vereda del Cerero hay otras 40 familias en la misma situación de exclusión social.
Los expertos calculan que hay tarea para varios años y todo con un objetivo final: eliminar estas infraviviendas. Pero se quiere hacer de una manera ordenada, para evitar los problemas como con los que se topó el Ayuntamiento de Sevilla cuando erradicó el asentamiento de Los Perdigones y sobretodo con el de Los Bermejales, donde optó por dar dinero a los chabolistas para que se fueran en una decisión sin precedentes y ampliamente criticada desde todos los sectores.
