El presidente del PP, Mariano Rajoy, habló ayer por primera vez sobre la imputación del presidente valenciano, Francisco Camps en el caso de corrupción Gürtel, para expresar su "pleno, total y absoluto apoyo del partido".
El apoyo lo hizo extensivo al secretario general del Partido Popular en Valencia, Ricardo Costa -también imputado-. Rajoy, a la pregunta en una entrevista en la Cadena Cope de si había hablado con Camps durante los últimos días, confirmó que ha dialogado con el presidente valenciano "muchísimas veces" durante las últimas fechas, y añadió que tiene "la total certeza" de que dice la verdad "y así lo aclarará con el juez la próxima semana" en la comparencia que tiene prevista ante el Tribunal Superior de Justicia valenciano.
El presidente de los populares aprovechó su intervención para hacer hincapié en el "respaldo absoluto" al señor Camps y también se mostró "absolutamente convencido" de que esta situación "se va a aclarar y se va a terminar pronto". Sobre la actitud tanto de Camps como de Costa, Rajoy añadió que los dos están deseando llegar ante el juez para que "esto termine" porque, en su opinión, se está convirtiendo en un juicio paralelo en los medios de comunicación "que no es el verdadero".
El líder popular también recordó que conoce a Camps desde hace muchos años, sabe cómo vive, "quién es y qué ha hecho y, desde luego, en este partido todos respaldamos a Camps y estamos convencido de su inocencia", concluyó Rajoy.
Estas declaraciones del líder el PP son las primeras que hace sobre la imputación del Camps en la trama Gürtel, dado que durante los últimos días los principales cargos del partido han cerrado filas en torno al presidente valenciano pero faltaba el apoyo explícito y público del presidente del Partido Popular. Así, las manifestaciones favorables a Camps vinieron de la portavoz popular del Congreso, Soraya Saénz de Santamaría; la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal o el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti.
Con la imputación de Camps, el juez pretende aclarar un posible delito de cohecho en relación con la supuesta trama de corrupción.
Según las investigaciones desarrolladas por el juez Baltasar Garzón antes de inhibirse en favor del TSJCV, Camps adquirió trajes por 12.783 euros pagados por Orange Market -una de las empresas de la trama supuestamente dirigida por Francisco Correa-, a cambio de otorgar adjudicaciones a esta sociedad, por valor de unos cuatro millones de euros. En el auto de inhibición, Garzón señaló que Camps adquirió "prendas y objetos disimulados en otros pedidos ajenos a las prendas obtenidas" y, en algún supuesto, en facturas por gastos del stand de Fitur.
