Jóvenes al día

Rebajas o cómo gastar más de lo que se espera

Los jóvenes afrontan las rebajas como un momento de oportunidad para adquirir cosas a buen precio. Este hecho hace que se compren productos innecesarios que terminarán repercutiendo en gastar más del presupuesto previsto.

el 10 ene 2015 / 08:00 h.

JOVENES COMPRANDO EN LAS REBAJAS Según el Programa de prevención y tratamiento de problemas personales relacionados con la adicción al consumo, hábitos personales de comprar y sobreendeudamiento, elaborado por el Instituto europeo interregional de consumo, los jóvenes tienen un nivel más alto de adicción a los estímulos de compra, y un nivel más bajo de autocontrol económico que los adultos. En todas las cuestiones referidas a la atracción por visitar comercios, realizar compras, o gastar dinero en forma impulsiva los jóvenes superan claramente a los adultos. De acuerdo con este informe, a los jóvenes les gusta más pasar el tiempo en centros comerciales que a sus mayores.  También respecto al autocontrol económico, las respuestas son claras en el mismo sentido: reconocen más que los adultos que a menudo gastan el dinero tontamente, son menos ahorradores y tienen más dificultades para controlar el dinero que gastan, se dejan convencer con mayor facilidad para hacer compras que no deberían, compran cosas sin haberlo pensado bien en mayor medida que los adultos, y es mucho mayor el número de jóvenes que admite que se les va el dinero sin darse cuenta de en qué lo han gastado. En la actualidad la crisis financiera también viene a marcar los hábitos de consumo entre los más jóvenes. La crisis económica, los efectos del desempleo y la creciente precariedad de los jóvenes han tenido una incidencia clara en las pautas de gasto de este colectivo en mayor medida que en otros grupos de edad según el informe de 2012 de Juventud en España elaborado por el Injuve (Instituto de la Juventud). Clara Peña, Marina Rodríguez, Marina Villena, Carlota Ojeda y Francisco Javier Prieto son cinco amigos que se han levantado a las ocho de la mañana para ser los primeros a las puertas de las principales tiendas de moda del centro de Sevilla. Ninguno llega a la veintena de edad y todos estudian. Aprovecharon que ayer  7 de enero no había clase para acudir al primer día del periodo de rebajas que se extenderá hasta finales de febrero. Al preguntar sobre cuánto llevaban gastado a eso de las 12 de la mañana todos coinciden en destacar: «Entre 70 y 90 euros». El presupuesto también es bastante parecido: «Unos 120 o 130 euros». A pesar de esperar a las rebajas, confiesan que han tenido que comprar alguna otra cosa durante las Navidades, bien para los regalos de Reyes o prendas  para vestir en las Fiestas. Entre las compras destacan sudaderas, botines, chandals, vaqueros... «Cosas básicas que necesitamos para diario, no venimos con pensamiento de comprar ropa para salir», explican. Aseguran que se encuentran buenas ofertas en rebajas: «Hay gangas». Son conscientes que en rebajas se termina cayendo en productos que realmente no se necesitan, pero matizan que en todo caso son cosas que no cuestan demasiado. Son conscientes del consumismo  y la compulsividad con la que las personas en general y los jóvenes en concreto se enfrentan a las rebajas y ponen como ejemplo que el día anterior habían revisado el catálogo de  productos de las principales marcas de ropa con idea de agilizar la búsqueda. «Tenemos hecho un planning con las tiendas que queremos visitar y las prendas que queremos encontrar», subrayan. VELANDO POR EL CONSUMIDOR. Los jóvenes en este momento están teniendo comportamientos de consumo distintos a los de hace una década, sobre todo en lo que se refiere al uso de nuevas tecnologías, redes sociales y el uso de aplicaciones móviles. Según Rubén Sánchez, portavoz de Facua (Federación de asociaciones de consumidores y usuarios de Andalucía) los jóvenes de hoy tienen un perfil  de consumidor diferente a los de antes y además destaca que se trata de usuarios más tempranos, ya que desde que comienzan a utilizar esos dispositivos se convierten en clientes de servicios de muy distinto tipo. «Estos servicios van desde tener un perfil en una red social, hasta descargarse aplicaciones o juegos del tipo que sea, pasando por el uso en sí que hagan del teléfono móvil. Las nuevas generaciones se están convirtiendo en consumidores prematuros, mucho más que antes y empiezan a provocar en los padres más decisiones de contratación», subraya Sánchez. Existe una coyuntura de crisis económica que provoca que se consuma menos, aunque los momentos de vorágine consumista como las rebajas provocan que aumente el consumo, este está más contenido por el contexto de crisis. En las rebajas hay un mayor consumo y los jóvenes demandan aquellos productos que están relacionados con la moda o las nuevas tecnologías que puedan estar de descuento. «Se ha intensificado el consumo de estos productos electrónicos y se hace cada vez de forma más prematura», subraya el portavoz de Facua. La publicidad no sólo influye en que se consuman determinados tipos de productos, también la popularización de determinados artículos o servicios electrónicos hacen que se consuman sin necesidad de publicidad. «No es por una publicidad tradicional, sino por otro tipo de márketing que ha logrado convertir en algo deseado ese tipo de aplicaciones. Sí hay una publicidad dirigida a los jóvenes, que además intenta aprovecharse del mayor nivel de credulidad que pueden tener ante determinados mensajes y pueden hacer caer en algunos lemas engañosos de la publicidad», asegura Sánchez. Destaca que el «marquismo» es un problema en la actualidad, la marca es concebida como calidad y a su vez es símbolo de buen posicionamiento dentro del grupo de amigos. «Es muy peligroso que piensen que la marca los puede ayudar a posicionarse frente a los demás o que se crean superiores  o inferiores al resto por poder comprar o no una determinada marca», resalta el experto en consumo. Sánchez explica que los jóvenes, de cara al periodo de rebajas, tienen que partir del concepto esencial de que en rebajas no se ahorra, sino que se gasta dinero: «Pensar que comprar un producto con un descuento es ahorra implica un error, ya que te lleva a gastar. Lo importante no es ver cuánto costaba el producto hace un mes, sino cuánto cuesta ahora». Desde Facua se ponen en marcha campañas de concienciación y asesoramiento ante fraudes publicitarios e intentos de fomentar hábitos de compra o contratación, además de hábitos de consumo inducidos por las marcas. Esta información y servicio se ofrece a todo tipo de personas con perfiles diferentes, con idea de hacer conocer mejor como funciona el mercado. CONSUMO RESPONDE. El modelo de consumo en la sociedad ha pasado de un rol tradicional de consumidor pasivo hacia el de un consumidor activo, que acude a internet para comparar las características, la calidad y el precio de los productos, y que es capaz de generar alianzas con otros consumidores online para obtener descuentos, denunciar productos defectuosos o inseguros, o protestar ante campañas abusivas o situaciones de desprotección. «Con la puesta en marcha de Consumo Responde, desde la Consejería de Salud se apuesta por fomentar el uso de la tecnología para acceder y compartir el conocimiento en red, fomentando que las instituciones y el sector empresarial sean más transparentes y participativos, y haya una mejor relación entre los diferentes agente de consumo», exponen desde la Secretaría General de Consumo. Consumo Responde es un servicio público de la Junta de Andalucía de información en materia de consumo, una plataforma multicanal que informa y forma a la ciudadanía sobre los derechos como personas consumidoras. A través de su página web: www.consumoresponde.es se pueden conocer todos los derechos y obligaciones que un consumidor tiene a la hora de comprar cualquier producto o adquirir un servicio como por ejemplo saber si la cláusula suelo de una hipoteca es abusiva o qué hacer si una compra por internet no ha sido satisfactoria, así como conocer las distintas vías de reclamación existentes. Además consumo responde es el nexo de unión e impulso del movimiento asociativo de personas consumidoras, de las empresas y de las entidades locales andaluzas para garantizar los derechos de la ciudadanía en materia de consumo. «Ahora Consumo Responde da un paso más para estar aún más cerca del usuario, y para ello pone a disposición un teléfono de contacto gratuito: 900215080, en el que se podrán resolver todas las dudas existentes en tema de consumo, así como obtener  la información que necesites o el lugar donde acudir para solucionar tu conflicto. Asimismo, se dispone del correo electrónico consumoresponde@juntadeandalucia.es», destacan. Entre las líneas de trabajo más destacadas del nuevo servicio se encuentra la promoción del consumo responsable y sostenible. Así, se favorece la información sobre la generación y consumo de productos, bienes y servicios que sean respetuosos con el medio ambiente, eficientes desde el punto de vista energético, y ajustados a las necesidades reales de la sociedad. El consumo responsable, es uno de los pilares de la economía sostenible y de la igualdad social, y es tarea compartida y responsabilidad de todos.

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