La Cabalgata de Reyes Magos de 2010 ya tiene repartidos sus papeles estelares. El Ateneo de Sevilla comunicó ayer el nombramiento de las personas que encarnarán a Melchor, Gaspar y Baltasar el próximo 5 de enero.
Manuel Eduardo Codes Manuel de Villena, desde este mes jefe del servicio de oncología médica del Hospital Virgen Macarena, personificará al rey Melchor. Número 1 de su promoción en el año 1974, este profesional sanitario, de 59 años, ha destacado por su dedicación profesional, de amplia repercusión social. "Supone una de las ilusiones más grandes de mi vida, ya que todo el mundo ha tenido en la infancia el sueño de ser rey mago", comentaba ayer, una alegría multiplicada en su caso tras convertirse en abuelo desde hace escasas fechas.
El rey Gaspar estará representado por el presidente-director de Cáritas Diocesana de Sevilla, Felipe Cecilia Franco, como homenaje a la amplia labor social que desarrolla la Iglesia Católica en momentos de crisis económica aguda. Este profesor de EGB ya jubilado, de 68 años, admitía ayer que su nombramiento constituía toda una sorpresa "dada mi situación social, que no es nada destacable". "No me imaginaba esto. Es digno de agradecer, no sólamente por uno, sino por la institución a la que represento".
Por último, el presidente del Real Círculo de Labradores, Antonio Rodríguez de la Borbolla, de 65 años, representará al rey Baltasar, "con motivo del 150 Aniversario de la fundación de un club social y deportivo de gran implantación en la ciudad". Miembro de la Fundación Heliópolis, Rodríguez de la Borbolla reconocía la "ilusión tremenda" que le había producido la noticia. "Como sevillano, sé lo que supone ser rey mago en Sevilla y más aún encarnar al rey Baltasar, que siempre es el que arrastra un plus añadido de simpatía".
La pintora Marita Rufino Rus, por su vinculación con el Ateneo de Sevilla, será la Estrella de la Ilusión del séquito real.
En palabras del presidente de la Docta Casa, Enrique Barrero, la de 2010 será "una Cabalgata de austeridad, acomodada por tanto a la situación económica que vive el país, aunque procuraremos un cortejo brillante". Las obras en Asunción o la Encarnación mantienen en vilo su itinerario.
