Rubén Castro posa junto a un anuncio en el campo de la ciudad deportiva.
-Primera semana íntegra para preparar la Liga en un mes. ¿Se agradece o se echa de menos la Copa?-La verdad es que ya nos habíamos acostumbrado a jugar los miércoles, pero ahora toca la Liga.
-Decía Isidoro que el Betis copero podía estar entre los seis primeros de Primera...
-Yo no sé si estaríamos entre los seis primeros, pero el Barcelona no había perdido en no sé cuántos partidos y eso significa algo. Jugamos mejor que el Barcelona, que no es nada fácil.
-¿El cansancio y los elogios influyeron en Villarreal?
-No. Sólo perdimos un partido, que no es gran cosa, y por el cansancio no fue porque el equipo está capacitado para jugar miércoles y domingo.
-¿Hubo regañina del míster?
-Todo lo contrario, nos dio ánimos porque hemos hecho una primera vuelta de récord.
-¿Sois el Barça de Segunda?
-Es verdad que intentamos jugar y sacar la pelota jugada, como el Barça, y en Segunda es muy difícil ver eso. Para mí somos el mejor equipo de Segunda, aunque eso hay que demostrarlo. Hasta ahora lo hemos hecho.
-46 puntos, que es una barbaridad, y sin embargo sólo tres de ventaja. ¿Es frustrante?
-El Celta y el Rayo siguen fuertes y no aflojan. Hay que apretar los dientes, no nos queda otra.
-¿El ascenso es cosa de tres?
-Creo que sí, somos los más fuertes y el ascenso va a estar más caro que otros años, harán falta más de 80 puntos.
-Y justo ahora suben dos...
-La verdad es que si llegan a subir tres, ya tendríamos el ascenso casi hecho.
-¿Mantener el ritmo en la segunda vuelta será posible?
-Es complicado, sólo hemos perdido tres partidos de 21 y ganamos casi todo en casa. La segunda vuelta siempre es más difícil, los equipos se juegan más.
-¿Cansa enfrentarse a rivales para los que el del Betis es el partido del año?
-Es que el Betis es muy grande y debemos vivir con ello, pero siempre salimos al 100%, sea cual sea el rival.
-¿El hambre y la humildad son dos de las claves?
-Sí, el grupo es una familia, hay gente joven y gente veterana, gente con ganas de jugar en Primera y muy humilde.
-Hablemos de ti. 14 goles en la Liga. Ni en tus mejores sueños, ¿no?
-Para nada, llevaba dos años haciendo 14 goles y en una vuelta lo he igualado. Ahora espero superar los 22 que hice con Las Palmas [2003-04].
-¿Este Rubén es mejor que aquel?
-Sí. Aquel fue mi primer año en Segunda, ahora tengo más experiencia y sé muchas más cosas.
-Tu media apunta a casi 30 goles. ¿Hacer 25 estaría bien?
-Sí, ojalá sean 25, puedo llegar. No me gusta poner cifras, pero quiero igualar lo que he hecho en la primera vuelta.
-¿Qué has hallado en el Betis que no hubiera en otras partes?
-Aquí me han tratado muy bien y el vestuario es un grupo, no es fácil convivir en un vestuario y este es uno de los mejores. Y luego la ciudad, la gente, la afición... Y cómo vive el fútbol la gente. Nadie es del Madrid o del Barça, o es del Betis o del Sevilla, eso me gusta muchísimo, y además viene mucha gente a los entrenos, no lo había visto nunca.
-Has estado en Albacete, Tarragona, Huesca... ("Mira que he dado vueltas", reconoce). Debió de ser duro, ¿no?
-Es verdad que no he estado dos años seguidos en el mismo equipo, pero siempre he confiado en mí, en que puedo jugar y triunfar en Primera. Hasta que lo consiga no me voy a quedar tranquilo; ojalá sea con el Betis.
-Si viniera el Dépor con una oferta por ti, ¿te lo plantearías?
-(ríe) Aquí estoy bien, quiero jugar con el Betis en Primera.
-Aquí no sólo marcas sino que también defiendes. ¿Siempre ha sido así o es que este año te encuentras fenomenal?
-Parte de culpa la tiene el míster, que me conoce bien. Mi función es el gol, pero si puedo ayudar en defensa, lo hago. Además, los compañeros lo agradecen.
-También sorprende la conexión con compañeros con quienes no habías jugado nunca.
-Es que con gente que es tan buena es muy fácil entenderse. Es difícil llevarse muy bien con otro delantero porque todos queremos marcar, pero aquí nos llevamos muy bien y eso facilita las cosas.
-La pregunta del millón: ¿por qué no ha triunfado Rubén Castro en Primera?
-Pues no lo sé, quizá no he jugado tanto como quería, pero todavía tengo tiempo y esperanza. Ojalá sea con el Betis.
