Al despertar, el día vaticinaba un recuerdo: la lluvia volvería a partir una Semana Santa que hacía mucho tiempo no era tan plena. Pero cuando la tarde empezaba a desaparecer, el sol indicaba que era la hora de salir. Y así lo hizo. A las 18.30 horas, la cruz de guía de la hermandad de los Dolores de La Rinconada salía con su patrona y alcaldesa perpetua.
La Virgen de los Dolores. / Foto: Diego Manuel ruperto
Tras las cruz de guía, procesionaba, bajo los 30 costales guiados por Pedro Velázquez, el Santísimo Cristo de la Misericordia. Sobre un monte de claveles rojos se erigía Jesús en la Cruz, quien marchó al son que le marcó la Banda de Cornetas y Tamboras La Salud de Huelva.
La Virgen de los Dolores siguió los pasos del Cristo por primera vez bajo palio con el corazón y los siete puñales que marcaban su dolor. La alcaldesa perpetua de La Rinconada procesionó gracias a las directrices de la cuadrilla de Francisco José Gómez. La emoción de la gente no fue la única que acompañó a esta dolorosa. La banda municipal de La Puebla del Río marcó el paso de los 30 costaleros que la recorrieron por calle como Maestro Morrillo de los Ríos, Amargura, Julia Palomo o Madre Teresa.
Pero fueron momentos únicos los que se vivieron cuando el cortejo de 200 nazarenos que portan el Cristo de la Misericordia y la Virgen de los Dolores pasaron por las estrechas calles Aire y Rosal. Sentimiento que se completó cuando las otras dos hermandades de la localidad, la del Cristo del Perdón y la de la Salud, recibieron a esta corporación fundada en el siglo XVII en la iglesia parroquial de la localidad. Poco después de las 23 horas se vivía uno de los momentos de mayor recogimiento: poco a poco, los nazarenos de capa, entraban de nuevo a la capilla de la Virgen de los Dolores en la Ermita del Hospital de La Santa Misericordia para culminar una Sábado Santo pletórico.
Pese al sentimiento que demostró su pueblo al verla pasar, este año la hermandad se sentía especialmente feliz no solo porque su estación de penitencia transcurriese con normalidad, sino porque la plenitud era máxima tras haber inaugurado la nueva casa hermandad. Aunque no se realizó ninguna parada especial durante el paso del cortejo por la puerta, la satisfacción se palpaba entre los cirios de los nazarenos. Y es que después de 20 años, el Viernes de Dolores tenía lugar la función principal donde los hermanos, acompañados de su titular, bendijeron su nueva sede, una cuenta pendiente desde que se comprara en 1993. El esfuerzo económico realizado durante este año para culminar los nuevos despachos de la hermandad impidió que ayer los titulares hicieran grandes estrenos en su estación de penitencia.
Si el tiempo lo permite, esta tarde el Santísimo Cristo de la Resurrección cerrará la Semana de Pasión de la Rinconada. Cuando el reloj marque las 18 horas, el Resucitado recorrerá las calles de la localidad bajo las órdenes de Francisco Gómez. El Señor Resucitado, acompañado de un ángel y dos centuriones romanos, preside este paso que anuncia la alegría de los cristianos. La Agrupación Musical Nuestra Señora de la Encarnación de la Hermandad de San Benito de Sevilla será la encargada de marcar el paso de Jesús por las calles de La Rinconada, que se recogerá en torno a las 22 horas, poniendo el punto y final a la Semana Santa.
