Primer atraganto para Elena Salgado, nueva ministra de Economía. Con el respaldo de su antecesor, Pedro Solbes, el Banco de España habría propuesto reducir la representación política en las cajas de ahorros y permitir que los bancos puedan comprar este tipo de entidades. Salgado habría echado para atrás semejantes planes y estaría diseñando "uno propio".
Pero en el Gobierno, mutismo. La vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, rechazó ayer especular sobre una posible reforma de la Ley de Cajas por "respeto" a la negociación que mantiene el Ejecutivo con las fuerzas políticas sobre "las nuevas medidas de respaldo al sistema financiero".
Insistió en que será la Elena Salgado la encargada de presentar el paquete de medidas una vez que esté cerrado, aunque aseguró que aún no hay una fecha para darlo a conocer.
"Economía trabaja con su propio plan y sigue trabajando con el mismo rigor y la misma documentación que antes. No está aprobado nada", subrayaron a Europa Press fuentes de este Ministerio tras ser preguntadas por esa hipotética reforma, que eludieron confirmar. Mientras, fuentes cercanas al Gobierno aseguraron a la cadena SER que Elena Salgado no había asumido los cambios planteados por el Banco de España, que sí contaban con el visto bueno de Pedro Solbes.
Por su parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, destacó ayer que una modificación de las cajas "no puede traer como consecuencia la privatización" de estas entidades, al tiempo que destacó que cualquier cambio normativo "debe de garantizar la naturaleza jurídica actual de las cajas".
Méndez reclamó al Ejecutivo que si existe algún borrador sobre modificaciones legales, esta reforma se debería incorporar al debate del diálogo social. "En las cajas no sólo hay representantes políticos, sino también de impositores, de trabajadores y de distintas instancias sociales que necesariamente habría que garantizarlo".
medel. Desde Cádiz, el presidente de Unicaja, Braulio Medel, defendió ayer el modelo de gobierno de las cajas de ahorros que, según indicó, "no será tan malo" cuando "en prácticamente todo el mundo las entidades financieras se han ido al garete" y en España "ni bancos ni cajas de ahorros estamos viviendo esa situación".
En cualquier caso, Medel dijo que "no hay que extrañarse" ante la posible modificación de la normativa de las cajas, puesto que "a lo largo de los últimos decenios se ha reformado varias veces, de ahí que instara a "desdramatizar" este asunto. Eso sí, quiso "diferenciar" entre lo que puede ser un cambio en la legislación y la situación económico-financiera actual, que son "dos cosas distintas".
En este sentido, señaló que un "buen gobierno de las cajas debe serlo en tiempos de crisis, de bonanza y los intermedios" y consideró que la regulación que el Gobierno hace de las cajas "no tiene que ser diferente en función del momento del ciclo económico en que nos encontremos".
El ser preguntado sobre el aspecto de la reforma que se centraría en limitar la injerencia política en estas entidades, consideró que sería "un mal enfoque" que el cambio "considerase que ese punto es el único o el prioritario".
