El Ayuntamiento de Sevilla ha anunciado hoy que ha reducido de 64 a 47 el número de calles cuyos nombres se cambiarán en virtud de la Ley de Memoria Histórica, para lo que se han aplicado "criterios objetivos, históricos y probatorios", según el primer teniente de alcalde, Antonio Rodrigo Torrijos (IU).
El listado, presentado hoy tras el trabajo de la comisión técnica creada al efecto, incluye 41 calles con nombres que se quieren cambiar así como otras seis en las que el cambio se limita a precisar algo respecto a lo nombrado.
En este último caso está la calle José María Pemán, que se denominará "Escritor José María Pemán"; Marqués Luca de Tena, que será "Torcuato Luca de Tena"; o Plaza Ruiz de Alda, que pasará a denominarse "Plaza Aviador Ruiz de Alda".
Para las otras 41 calles, las once juntas municipales de distrito definirán los nuevos nombres, cuyo listado será definitivo cuando lo apruebe el pleno de julio próximo, según el concejal, que pretende concluir todo el proceso antes de que acabe el año, aunque ha precisado que no tiene "prisa" por hacerlo.
Desde el Ayuntamiento se insta a que los nuevos nombres sean de mujer, de lo que hay "déficit", de científicos y de personas relevantes por su labor relacionadas con cuestiones sociales, según Torrijos.
Entre las 41 calles que se cambiarán de nombre están las calles Belchite, Brunete, la avenida García Morato, la calle General Merry, la avenida Presidente Carrero Blanco, la avenida Ramón de Carranza o la calle José María Sánchez Arjona.
Para no perjudicar a los vecinos que tendrán una nueva denominación de las calles, el Ayuntamiento ha anunciado que de oficio hará los trámites con 73 entidades entre bancos, Hacienda o centros de salud para comunicar las nuevas denominaciones de calles y los vecinos que residen en ellas, y también habrá negociaciones para el nuevo DNI que requieran los ciudadanos.
Torrijos ha insistido en que las decisión de cambios de nombres se hecho "desapasionadamente" y con "una voluntad de generosidad política y de respeto vecinal y familiar al entorno de las personas" cuyos nombres no estarán en el nuevo nomenclátor.
"No hay ninguna valoración de carácter subjetivo" ni se tiene en cuenta que los afectados sean "de derecha o conservadores" para retirar algunos nombres, se retiran porque así lo dice el artículo 15.1 de la Ley de Memoria Histórica, ha apuntado el concejal.
La ley dice que las administraciones públicas "tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación personal o colectiva de la sublevación militar de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura", ha subrayado Torrijos.
"No se quita (el nombre de la calle) por ser una buena persona", ha insistido el concejal, quien ha señalado que con la decisión adoptada "se respeta la ideología, el entorno familiar y las bondades reconocidas por su entorno vecinal, que no están en cuestión".
El Ayuntamiento ha reducido el listado inicial de 64 a 47 calles una vez demostrado que algunos nombres no participaron "en la represión posterior durante la época del régimen fascista de Franco" y se ha creado "una legítima duda razonable" al respecto, lo que estarían dispuestos a hacer si ocurre lo mismo con el nuevo listado.
Torrijos y el concejal de Innovación Tecnológica, Juan Antonio Martínez Tronocoso, han señalado que no tienen previsto publicar la motivación de por qué se retira un nombre "porque no queremos abrir heridas", y han apuntado que entre los dos han contado con el asesoramiento de ocho personas, en su mayoría historiadores de Sevilla.
