Ndiaga Diop es un vendedor ambulante de 53 años de origen senegalés que reside en España desde el año 1991. Lleva varios años intentando conseguir la nacionalidad española, que el Ministerio del Interior le denegó en su momento por considerar como motivo de peso que lo hacía "no adaptado" a la sociedad española el estar casado en su país natal desde el año 1982 "con opción a la poligamia".
El Tribunal Supremo (TS) le ha concedido finalmente la nacionalidad, a pesar de que el Código Penal castiga la práctica de la poligamia. La Audiencia Nacional (AN) ya había fallado en 2008 a favor del proceso de integración de Ndiaga Diop, por encima de su decisión de ser polígamo, una práctica "legítima en Senegal" y "conforme a su confesión religiosa musulmana". Sin embargo, un recurso de casación de la Abogacía del Estado había bloqueado este fallo, que finalmente ha declarado desierto un auto del pasado 9 de febrero dictado por la Sala de lo Contencioso del Tribunal Supremo.
La Abogacía del Estado, después de recurrir la sentencia de la AN, no sustanció finalmente el escrito, por lo que el magistrado-ponente del Supremo, Rafael Fernández Montalvo, la ha ratificado y le ha dado carácter de firmeza. Por tanto, el vendedor ambulante es, de forma oficial, nuevo ciudadano español de pleno derecho.
La AN apuntó entonces en su fallo que la resolución negativa adoptada por el Ministerio del Interior suponía "tanto como negar" en casos como el de Ndiaga Diop la posibilidad de integración en la sociedad española a través del correspondiente proceso evolutivo de adaptación", que el magistrado-ponente, Francisco Díaz Fraile, reconoce en el senegalés, que está afincado de forma legal en Almería desde el año 1991.
"Lo cierto" es que Ndiaga Diop, según ahonda el magistrado, "se ha adaptado a su nueva sociedad y su comportamiento no es contrario al orden público protegido por la ley". "Habla correctamente castellano -continúa-, sigue el estilo de vida español, tiene su fuente de ingresos como vendedor ambulante y su desenvolvimiento en el entorno social no presenta problema alguno".
Esta misma tesis la sostuvieron en 2002 el juez y el fiscal encargados de emitir un informe preceptivo durante la tramitación de la solicitud de nacionalidad española. A pesar de ello, el Ministerio del Interior se atuvo al certificado de matrimonio en el que se hacía constar que el demandante declaraba "optar por la poligamia con una dote de 18.000 francos".
Ndiaga Diop tiene al menos cinco hijos con su esposa, quien reside en Senegal, pese a lo cual mantuvo a lo largo de toda la tramitación que el citado documento que certificaba su matrimonio era "erróneo". Para ratificarlo aportó un nuevo certificado donde se declaraba que el matrimonio había sido contraído "según la costumbre ouoloff islamizado y opta por el régimen de monogamia con separación de bienes y una dote de 18.000 francos".
El magistrado-ponente Díaz Fraile minimiza en este caso, no obstante, la contradicción entre ambos escritos que, según refleja, "no está lo suficientemente aclarada o justificada". Además, enfatiza que, "aunque la opción de la poligamia fuera cierta, apelar a ella supone negar en estos casos toda posibilidad de integración" en España.
