La noche de este 15 de diciembre puede marcar un punto de inflexión en la temporada del Sevilla. Cinco derrotas seguidas lo han sumergido en la peor racha de los últimos años, y con este peso en su espalda se juega el ser o no ser en la Europa League. Por si fuera poco, tendrá enfrente al Borussia Dortmund, líder de la Bundesliga y equipo al que sólo le vale la victoria. El de Gregorio Manzano, por su parte, se uniría al PSG en la siguiente ronda, bien como primero de grupo, bien como segundo, empatando. En cualquier caso, el objetivo es seguir adelante. Por eso, el Sevilla llama a filas a su afición para que arrope al equipo y, juntos, poder darse una alegría. Todos a una.
Dada la trascendencia del choque, Manzano ha tirado de todos los futbolistas disponibles, incluidos Luis Fabiano, Fazio y Jesús Navas. Según explicó en rueda de prensa, con los dos primeros se puede ser optimista de cara a su concurso esta noche, pero con el palaciego hay que ser cautos y esperar hasta última hora.
En principio, el brasileño tiene más opciones de ser titular que Fazio si se tiene en cuenta la prolongada convalecencia del argentino. A priori, Jesús Navas podría ocupar una plaza en el banquillo por si las cosas se complican. De todos modos, no será hasta hoy mismo cuando el técnico decida al respecto, ya que también está pendiente de la evolución de Perotti, con problemas musculares desde hace unos días.
Los únicos futbolistas sin opciones de jugar son Guarente, Koné, Drago, Sergio Sánchez y el sancionado Fernando Navarro. La ausencia del lateral barcelonés provocará cambios en la zaga, donde Alexis -baja en el Bernabéu por sanción- y Escudé se disputan la titularidad. Luna ha entrado en la lista, aunque Dabo se perfila como lateral zurdo, quedando el derecho para Konko.
EL SISTEMA. La gran incógnita es si Manzano jugará con dos delanteros, tras recuperar a Luis Fabiano, o, por el contrario, apostará de nuevo por alinear a tres mediocentros para dar consistencia a un equipo muy frágil en defensa, tal como ya hiciera en Alemania.
La recuperación Luis Fabiano, Jesús Navas y Fazio supone todo un aliciente para el Sevilla, aferrado al recuerdo de las grandes noches europeas en Nervión para hacerse fuerte y seguir adelante en este torneo. Hasta la fecha, sólo cuatro equipos (AZ Alkmaar, CSKA Moscú, Sporting de Braga y PSG) han sido capaces de ganar en campo sevillista, de un total de 49 partidos disputados como local por el conjunto blanquirrojo (ganó 36 y empató 9). El problema es que tres de esas derrotas llegaron en las cuatro últimas citas en casa.
UN PROYECTO Y SU CREDIBILIDAD. El Sevilla es consciente de la trascendencia del encuentro. El propio Del Nido lo califica de "final", ya que uno de los dos equipos quedará apeado. Pero además de seguir adelante en la competición que marcó un antes y un después en la historia del club se pone en juego la credibilidad del proyecto. Muchos jugadores no terminan de convencer y hasta Manzano anda en entredicho para un sector de la opinión pública.
Superar esta auténtica final -basta un empate- significaría, en cambio, toda una reinvindicación, ni más ni menos que ante el Borussia Dortmund, una máquina a pleno rendimiento que no pierde desde que lo hiciera ante el propio Sevilla. Ahí es nada. Pero nunca un equipo alemán ganó en Nervión...
