El rodaje de un anuncio publicitario requiere alrededor de 50 trabajadores técnicos, sin contar actores ni extras, por eso el Gobierno municipal está decidido a captar clientes, a que Sevilla sea el tercer escenario del país más demandado, tras Madrid y Barcelona, por las grandes productoras publicitarias. Valencia es su dura competidora. Por ahora, el trabajo de los últimos años empieza a dar frutos y se asegura que los rodajes subieron ya un 25%.
Para que Sevilla resulte atractiva para el mundo publicitario, el delegado de Empleo, Economía, Fiestas Mayores y Turismo, Gregorio Serrano, anunció ayer la modificación de la ordenanza para que los permisos para rodar en Sevilla se concedan en cinco días, y no en los 15 actuales, y para bajar las tasas que pagan las productoras por filmar en la ciudad, aunque no concretó cuánto se rebajarán. El objetivo es ser competitivos y crear empleo, por eso en la nueva web de Sevilla Film Office se ofrecen los servicios de empresas sevillanas de maquillaje, iluminación, cámaras... para que los puestos de trabajo que se creen con esos anuncios se queden en casa. "Queremos exportar el talento sevillano", indicó Serrano.
Sevilla acogerá el próximo 3 y 4 de noviembre un encuentro de productoras especializadas en el cine publicitario que reunirá a más de 80 productoras de todo el mundo y por ese motivo el presidente de la Asociación de Productores de Cine Publicitario, Miguel Heras, informó ayer, junto a Serrano, de la "nueva estrategia" a seguir por la Sevilla Film Office para incrementar el numero de rodajes que alberga la ciudad.
Según Heras, el sector lleva años demandando la agilización de los permisos, de ahí que considerase "muy adecuada" la respuesta del Ayuntamiento. ¿Y a qué se debe el incremento de los rodajes? A su juicio, al aporte y la presencia de la ciudad en estos encuentros del sector en los últimos años. En 2010 se rodaron en Sevilla 12 anuncios publicitarios, mientras que en lo que va a de año ya se filmaron 16. El negocio que se genera es de un millón de euros al año, según Heras, quien añadió que en estos datos no se incluyen los anuncios o reportajes fotográficos.
¿Y cuánto vale un anuncio? Depende de muchos factores, pero una marca nacional importante se puede gastar entre 50.000 y 150.000 euros al día.
¿Y qué es lo que más atrae a las productoras de anuncios de cine? La Sevilla tradicional es la que más se impone, la que más sugiere, pero "los nuevos valores se tienen ya en cuenta". Nuevos valores como el Metropol Parasol de la Encarnación, donde ya se han rodado varios anuncios de marcas internacionales, por ejemplo, del sector automovilístico.
Aunque casi todo rodaje conlleva molestias para los vecinos o problemas de tráfico, lo cierto es que el cine o la publicidad crea empleo y genera ingresos económicos en la hostelería y la restauración. Además, como apuntó Gregorio Serrano, convertir Sevilla en un gran plató supone una costosa y casi siempre beneficiosa promoción de su marca. "Sevilla se ve en todo el mundo", apuntó el concejal del PP tras recordar que sólo el rodaje de la película El Gran Dictador generó ingresos en la ciudad de alrededor de 1,5 millones de euros.
Eso sí, para que aumenten los ingresos en la ciudad por el rodaje de cine o publicidad, Sevilla tiene que luchar contra el atractivo de Valencia, ya que Madrid y Barcelona son inalcanzables y Bilbao está detrás de la oferta sevillana y valenciana.
Según Heras, entre el 60% y el 65% de los anuncios españoles se ruedan en Madrid, mientras que un 30% se filman en la capital condal. El escaso resto, un 5% o 10%, se lo disputan ciudades como Sevilla y Valencia. En crisis, todo desplazamiento supone un coste extra.
