Cuando el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano, recurrió al Tribunal Supremo para recuperar unos terrenos de titularidad nazarena que fueron cedidos ilegalmente a Sevilla en 1937, en realidad no pensaba librar una verdadera batalla legal contra el Ayuntamiento hispalense, que también es socialista. Era una estrategia para sentarse a negociar con ellos el intercambio de estos solares por otros, menores pero más golosos para el municipio nazareno: la parte sevillana del suelo donde se asienta la universidad Pablo de Olavide, parte de Tablada y un carril para llegar a la ermita de Valme. Pero ahora que el Supremo ha tumbado su recurso y la negociación con Sevilla sigue estancada, Toscano ha anunciado que redoblarán los esfuerzos por recuperar sus terrenos.
A la espera de que el gabinete jurídico de Dos Hermanas revise la sentencia del Tribunal Supremo, el alcalde adelantó ayer que él se inclina por usar las dos vías posibles, la judicial, elevando el recurso al Tribunal Constitucional, y la legislativa, pidiendo al Gobierno central que anule el decreto ley que autorizó el traspaso de suelos a Sevilla, invocando la Ley de la Memoria Histórica. "Mi opción personal, lo que creo que debimos hacer desde el principio, es plantear la nulidad de lo que se hizo, de aquel decreto ley", advirtió Toscano.
Los dos ayuntamientos socialistas litigan desde el año 2000 por unos terrenos que hasta la Guerra Civil eran nazarenos, pero que en 1937, mediante un decreto-ley dictado por un gobierno golpista constituido en Sevilla, fueron traspasados a la capital andaluza. La superficie total abarca 2.763 hectáreas y ocupa las barriadas sevillanas de Bellavista, Pineda, ElCano, parte de Tablada, parte de los terrenos del Puerto de Sevilla, una zona de Bermejales y parte de Heliópolis. En la actualidad, viven allí 25.000 personas empadronadas en Sevilla. Una sentencia favorable a Dos Hermanas complicaría las cosas a la capital. El Pleno municipal aún tiene que aprobar si recurren al Constitucional, aunque Toscano ya ha avanzado que "por obligación democrática" agotarán todas las vías judiciales.
sigue la comisión. Sevilla, mientras, opta por la prudencia y esperará a conocer los detalles de la sentencia antes de dar un paso más. Por ello, la portavoz del gobierno municipal, Maribel Montaño, respetó tanto una sentencia "que una vez más defiende los límites territoriales de Sevilla" como la decisión de seguir adelante del alcalde de Dos Hermanas, "que tiene todo el derecho de actuar en beneficio de su municipio". Montaño, pese a ello, insistió en que "la Justicia ha hablado a favor" y recordó que no se trata de la primera vez.
Pese a ir con viento a favor que da el fallo del Supremo, el Ayuntamiento de Sevilla prefirió lanzar un guante a Dos Hermanas al asegurar que, por el momento, mantendrá esa comisión mixta ideada en agosto por el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, para buscar "una solución consensuada" al conflicto de las lindes. "La comisión seguirá para buscar una vía fuera de la judicial para llegar al entendimiento", precisó Montaño, que indicó que el Consistorio "no se precipitará" si hay alguna posibilidad de hallar "puntos en común".
